
La Filmoteca Española ha recuperado para el público una de las obras más emblemáticas y controvertidas del cine nacional: El inquilino, dirigida por José Antonio Nieves Conde en 1957. Esta restauración, realizada por el Centro de Conservación y Restauración de Fondos Fílmicos Carlos Saura, se basa en la versión no censurada que el propio cineasta pudo reconstruir en 1993, más de tres décadas después de que la película sufriera la intervención directa de la censura franquista.
La historia de El inquilino es la de una familia madrileña, encabezada por Evaristo (Fernando Fernán Gómez) y Marta (María Rosa Delgado), que, junto a sus cuatro hijos, enfrenta el desalojo inminente de su vivienda debido a la demolición del edificio donde residen. La búsqueda desesperada de un nuevo hogar los lleva a solicitar ayuda a una agencia inmobiliaria, a un banquero y al promotor que ha adquirido el bloque, sin obtener respuesta. Solo los obreros encargados de la demolición les permiten permanecer en el último piso, el próximo en ser derribado. Mientras el edificio se desmorona, la familia debe encontrar una solución contrarreloj. La película forma parte además del ciclo que está realizando la Filmoteca en torno la vivienda, bajo el título Un planeta de inquilinos. El derecho a una vivienda digna.
El trasfondo de la obra es una crítica mordaz a la política de vivienda durante la dictadura de Francisco Franco. En palabras del propio Nieves Conde, “El primer problema que tuvo que resolver el equipo de producción fue cómo rodar las escenas del derribo de una casa real. Afortunadamente, se pudo resolver a través del Ayuntamiento. Numerosos grupos especulativos estaban brotando como hongos en torno a la construcción de las nuevas viviendas. La película no hizo más que reflejar lo que estaba sucediendo. Por eso El inquilino es, a su vez, un documental”. El director recurre a la parodia y al humor como herramientas para sortear la censura y denunciar la precariedad habitacional que asolaba las grandes ciudades españolas en los años cincuenta, agravada por el éxodo rural y la especulación inmobiliaria.

Un sainete de época
El uso del sainete, una forma teatral popular caracterizada por la sátira social, permitió a Nieves Conde y a otros cineastas de la época abordar temas incómodos para el régimen. Obras como Surcos (1951), también de Nieves Conde, Esa pareja feliz (1951) de Juan Antonio Bardem y Luis García Berlanga, o El pisito (1959) de Marco Ferreri e Isidoro M. Ferry, compartieron este enfoque crítico, retratando la escasez de viviendas dignas y la desigualdad social.
El retrato de Madrid en El inquilino es el de una ciudad tensionada por la falta de recursos y la indiferencia de las autoridades. La película ridiculiza el discurso oficial y la propaganda del régimen, así como los mensajes grandilocuentes de los políticos franquistas. El crítico Luis Deltell definió la obra como una “parodia de una España de proletarios”, subrayando su carácter subversivo. Esta crítica no pasó desapercibida para el entonces ministro de la Vivienda, José Luis Arrese, quien, sintiéndose aludido, impulsó el proceso de censura tras el estreno.
La relación de El inquilino con la censura franquista fue especialmente conflictiva. Tras su estreno en el Cine Rialto de Valencia el 24 de febrero de 1958, la película fue retirada de las salas y la productora se vio obligada a modificar varias escenas, incluido el desenlace, para adecuarse a las exigencias del régimen. Nieves Conde relató el impacto de esta intervención: “Todo se había desarrollado con buen ritmo. El rodaje, el montaje, la sonorización, el proceso de mezclas, el tiraje de copias, el trámite de la censura, el estreno. Y se estaba preparando el plan de rodaje para la siguiente película... ¡cuando todo saltó por los aires!... Una inesperada censura nos lanzó (como a Evaristo, el protagonista de la película) a la puñetera calle”. El director añadió: “La película fue censurada. Fue machacada, fue apaleada, fue cortada, fue alterada. Y entre tantas barbaridades se anularon escenas, se suprimió el final, y se tuvo que admitir su sustitución por otro más complaciente para poder salvar en parte la película”.

Una historia de luchas con final feliz
El proceso de censura se prolongó durante dos años, con enfrentamientos entre distintos ministerios y los intentos de Nieves Conde por revertir la situación. Finalmente, el Ministerio de Información impuso una serie de modificaciones, siendo la principal el cambio del final por uno más optimista, acorde con la imagen que el régimen quería proyectar. La versión censurada fue la que se exhibió finalmente, cinco años después del estreno original.
La situación cambió en 1993, cuando, gracias a las gestiones de Federico Vaquero, se localizó una copia de la película tal y como fue concebida inicialmente. Nieves Conde expresó su sorpresa: “Yo estaba convencido de que la película, tal y como se rodó, nunca sería más que un sueño. Pero la película no había desaparecido. Gracias a las gestiones efectuadas por Federico Vaquero se descubrió, tras más de treinta años, que había una copia del film tal y como había sido rodado”. Esta versión, considerada por el director como la original, fue completada con material adicional, incluyendo el tráiler, textos explicativos sobre el proceso de censura y escenas de la versión alterada.
La restauración llevada a cabo por la Filmoteca Española se ha basado en el negativo de la versión censurada, complementado con imágenes de la copia no censurada de 1993. El trabajo técnico ha consistido en eliminar o reducir al mínimo rayas, motas, marcas de empalmes y de proyección, tanto en imagen como en sonido. El inquilino se incorpora así al catálogo de restauraciones de la institución, junto a títulos de cineastas como Basilio Martín Patino, Carlos Saura, Iván Zulueta, Cecilia Bartolomé o Nadia Werba, con el objetivo de difundir y preservar el patrimonio cinematográfico español en festivales, instituciones y medios nacionales e internacionales.
Últimas Noticias
La película española que cambió la historia del jazz y que el New York Times situó entre las mejores de todos los tiempos: “La música hecha cine”
Entrevistamos a varios de los artistas grabados por Fernando Trueba en ‘Calle 54′, un documental musical sin precedentes que celebra su 25 aniversario con varios conciertos en Madrid

La dura reflexión de Jeremy Irons sobre la atención que reciben los famosos en el mundo del cine: “Eres más importante como mercancía que como persona”
El actor ganador de un Oscar por ‘El misterio de Von Bülow’ explica una valiosa lección que aprendió tras el éxito de sus primeras películas
Esta bandera pirata aparece en manifestaciones de todo el mundo: por qué ‘One Piece’ se ha convertido en un símbolo de resistencia global
La figura de una calavera pirata con un sombrero de paja ha aparecido en protestas de diferentes países e incluso ha sido confiscada por la policía
Abren una de las tumbas egipcias más grandes de la necrópolis del Valle de los Reyes por primera vez después de varias décadas
Un equipo de expertos de la Universidad de Waseda, en colaboración con la UNESCO, ha restaurado los murales del interior del recinto

Eugène Boudin, el precursor del impresionismo que quiso capturar la fugacidad de la luz
Pionero de la pintura al aire libre, abrió el camino de los impresionistas con sus cielos en movimiento y sus conquistas técnicas. Su influencia fue decisiva para Monet. Recientemente hubo una muestra extraordinaria con sus obras en París
