El clásico de Akira Kurosawa que reviven Denzel Washington y Spike Lee llega a Apple TV+: “Es puro Shakespeare”

El tándem formado por el célebre actor y el director afroamericano vuelven a reunirse en ‘Del cielo al infierno’

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Denzel Washington en 'Del cielo
Denzel Washington en 'Del cielo al infierno', su nueva colaboración con el director Spike Lee (Apple TV+)

El reencuentro entre Spike Lee y Denzel Washington en la pantalla ha dado lugar a una de las colaboraciones más longevas y productivas del cine estadounidense, y su más reciente proyecto, Del cielo al infierno, profundiza en los dilemas morales y sociales que han marcado la trayectoria de ambos.

Esta nueva producción, disponible en AppleTV+, representa la quinta ocasión en que director y actor unen fuerzas, consolidando una relación creativa que se extiende por más de treinta años y que ha explorado aspectos fundamentales de la experiencia afroamericana.

Una versión hip hop de ‘El infierno del odio’

La película, que reinterpreta el clásico japonés El infierno del odio (1963) de Akira Kurosawa, traslada la acción a una Nueva York contemporánea, marcada por profundas divisiones de clase y raza.

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En esta versión, el protagonista, interpretado por Denzel Washington, es un productor musical que se enfrenta a un dilema ético cuando, en vísperas de cerrar un acuerdo financiero crucial, un secuestrador que pretendía raptar a su hijo termina llevándose por error al hijo de su chófer.

Spike Lee ha explicado que, aunque ha respetado el espíritu de la obra original, ha optado por darle un giro personal: “He respetado el espíritu de la película original y le he dado una vuelta. En ese sentido, podría decirse que he hecho lo que los músicos de jazz llevan haciendo toda la vida: tomas una pieza clásica y la aderezas echándole tu propia salsa; eso mismo son la versión que John Coltrane creó de ‘My Favorite Things’ y la de ‘My Funny Valentine’ que se inventó Miles Davis”.

El director neoyorquino reconoce la influencia de Kurosawa en su carrera, recordando que para rodar Nola Darling (1986) se inspiró en la mítica Rashomon (1950).

Denzel Washington en una escena
Denzel Washington en una escena de 'Del cielo al infierno' (A24 via AP)

Sin embargo, Del cielo al infierno se distancia del homenaje para convertirse en una síntesis de los temas recurrentes en la filmografía de Lee: la vida en la Gran Manzana, la cultura hip hop, el arte afroamericano y el conflicto entre la integridad creativa y las exigencias del mercado.

El dilema central de la película, según el propio director, busca interpelar al espectador: “El objetivo es que los espectadores acaben de ver la película y se pregunten: ‘¿Qué haría yo en esa misma situación?’”.

Denzel Washington y Spike Lee: una relación duradera

La complicidad entre Lee y Washington se mantiene intacta tras casi dos décadas desde su anterior colaboración en Plan oculto (2006).

El director no duda en calificar a Washington como “el mejor actor vivo del mundo”, mientras que el actor, con humor, reconoce la inspiración que le provoca su compañero: “Me inspira este anciano que tengo al lado, sigue comportándose como lo haría un niño en una tienda de golosinas, y el entusiasmo infantil que siente por su trabajo me inspira y me contagia”.

Su filmografía conjunta incluye también Cuanto más, mejor (1990), Malcolm X (1992) y Una mala jugada (1998).

Denzel Washington y el director
Denzel Washington y el director Spike Lee, una amistad y una relación profesional duradera REUTERS/Aude Guerrucci

Uno de los momentos más destacados de Del cielo al infierno es una escena en la que Washington protagoniza una improvisada batalla de rap junto a A$AP Rocky, un episodio que, según la crítica, quedará como uno de los hitos interpretativos del actor y que ejemplifica el choque generacional que atraviesa la película.

Lee lo resume así: “También es una historia sobre la desconexión que las viejas generaciones sentimos respecto al mundo moderno. A un lado sitúa al viejo pistolero y, al otro, al novato que intenta destronar al rey. Es puro Shakespeare”.

La reflexión sobre el impacto de la tecnología en la sociedad contemporánea también ocupa un lugar relevante en la visión de Lee.

El cineasta expresa su preocupación por el efecto de las nuevas herramientas digitales en la creatividad y la educación: “No quiero sonar como un abuelo, pero corremos el riesgo de ser idiotizados por ellas. ¿Y qué hay de la educación que imponen en nuestros hijos? Hoy en día los estudiantes se sirven de la inteligencia artificial para hacer sus trabajos académicos; la creatividad y el arte, y hasta el alma humana, corren el riesgo de ser reemplazados por máquinas. Tal vez haga otra película sobre ello”.

Del cielo al infierno se presenta así como una obra que, más allá de su condición de adaptación, condensa las inquietudes y el estilo de Spike Lee, al tiempo que reafirma la vigencia de su colaboración con Denzel Washington, que parece sentirse más cómodo con el director que con ningún otro.