La película basada en hechos reales ambientada en la isla que es 6 meses de Francia y 6 de España: “Mientras preparábamos el rodaje se ahogaron 6 personas y otras fueron arrolladas por el tren”

‘La isla de los faisanes’ es la ópera prima de Asier Urbieta y nos presenta, en forma de thriller, una realidad social desconocida, la del flujo de personas africanas que intentan entrar de manera ilegal en Francia a través de nuestro país

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Tráiler de La isla de los faisanes, una película que aborda la crisis migratoria en Europa

En la frontera entre España y Francia, en Irún, cerca de la desembocadura del río Bidasoa, encontramos un pequeño trozo de tierra que tiene una particularidad: su soberanía se comparte de forma amistosa entre España y Francia, de forma que durante seis meses su control pertenece a un país y los otros seis meses a otro. De esta forma, se considera el condominio más pequeño del mundo.

Ahora, se estrena una película con ese nombre que, precisamente, se encarga de poner en primer término esta insólita situación para contar una realidad de lo más problemática que está ocurriendo ahora mismo entre la frontera entre España y Francia, convertida en uno de los puntos de paso migratorio con más tráfico en nuestro país.

Jone Laspiur y Sambou Diany
Jone Laspiur y Sambou Diany en 'La isla de los faisanes', de Asier Urbieta (Bteam)

“A través de la prensa me enteré de que una persona negra se había ahorcado en frente del río Bidasoa. Empecé a documentarme a través de la red de acogida de Irún (en la película este enlace lo interpreta Itziar Ituño) y me dijeron que no se trataba de un hecho aislado, que esa frontera se había convertido en un lugar importante en el flujo de personas que vienen de África al norte de Europa pensando encontrar una vida mejor”, cuenta a Infobae España el director de la película, Asier Urbieta.

Al parecer, este hombre que se ahorcó, había cruzado de forma clandestina varias veces y, en todas ellas, había sido devuelto a lo largo de tres años, hasta que no pudo más y decidió acabar con su vida. “Durante el proceso de preparación de la película, se ahogaron seis personas en el río y otras más fueron arrolladas por el tren. Me di cuenta de que tenía que contar esta historia”, continúa Urbieta.

De qué va ‘La isla de los faisanes’

La película se centra en la relación de una pareja, Laila (Jone Laspiur) y Sambou (Sambou Diaby), que trabajan juntos en un taller donde construyen ‘gigantes y cabezudos’ para las fiestas populares. Sin embargo, un día ,mientras pasean junto a la orilla del río, verán cómo dos inmigrantes están a punto de ahogarse. Ella logrará salvar a uno, pero Sambou se quedará inmóvil, paralizado y no será capaz de reaccionar para ayudarla con el otro, que terminará desapareciendo.

Y es que Sambou, a pesar de estar integrado dentro de la sociedad vasca y de haber nacido allí, no deja de ser hijo de inmigrantes que tuvieron que pasar las mismas calamidades para establecerse en Euskadi, por eso siente todavía el peso de esa herencia de discriminación racial.

El actor que lo interpreta, Sambou Diaby, tiene mucho que ver con el personaje, ya que nació en Zumaya de padres migrantes. “Creo que es necesario que se cuente una historia que está pasando en tiempo real y que, lamentablemente seguirá ocurriendo. Mi padre también llegó en una patera, tuvo que cruzar el desierto y jugarse la vida para llegar a España, así que conozco de primera mano lo que se lucha para sobrevivir”, cuenta el actor. “Es necesario poder dar voz a estas historias, porque la gente las desconoce y hay demasiado prejuicio incrustado”.

A Jone Laspiur la conocimos gracias a Ane, de David P. Sañudo, gracias a la que consiguió el Goya a la mejor actriz revelación. Siempre se ha caracterizado por encarnar a mujeres fuertes y luchadoras y, en este caso, su personaje se convierte en la fuerza motriz a la hora de implicarse con aquello que tiene frente a sus ojos y que mucha gente prefiere obviar.

Jone Laspiur y Sambou Diany
Jone Laspiur y Sambou Diany en 'La isla de los faisanes', de Asier Urbieta (Bteam)

En la Isla de los faisanes no hay faisanes, pero sí que se ha convertido en una especie de símbolo sobre lo que significan las fronteras. “Al final no deja de ser una metáfora muy interesante sobre por qué dos países se disputan la soberanía de un trozo de tierra tan diminuto. Es tan poético como absurdo. Así que también queríamos hablar de eso, del concepto de espacio que nos pertenece y los derechos que ello conlleva. Al final somos todos seres humanos y la tierra no debería de ser de nadie”, dice el director.

Asier Urbieta reconoce que se está empezando a hacer un cine social diferente en nuestro país alejado de los clichés que a menudo lo habían acompañado. Nombra la reciente Muy lejos, en la que también se habla del tema de la emigración desde una perspectiva diferente.

Comenta también que quería hacer un thriller fronterizo. “Es una apuesta, lograr entretener al espectador al mismo tiempo que se reflexiona sobre temas importantes. No tiene que ver con que haya escenas de acción, sino de que la intriga tenga un mensaje”.

En la película hay un personaje que hace fotos a los cadáveres, pero no para publicarlas, sino para dar constancia de que esa realidad está basada en hecho reales. Está basado en Gari Garaialde, que ha retratado la emergencia en el Bidasoa desde hace siete. años. “Si no se registra, parece que no existe”, dice en la película. Esa es la cuestión.