La IA podría reducir hasta un 20 % los costes laborales de los bancos, según McKinsey

Madrid, 15 dic (EFECOM).- La adopción de la inteligencia artificial (IA) por los bancos podría reducir hasta un 20 % sus costes laborales unitarios, según el informe McKinsey Global Annual Banking Review 2025, dedicado a 'La nueva era de la banca', publicado por la consultora McKinsey.

El trabajo dado a conocer este lunes destaca que a medida que la IA se implemente en el sector bancario podría generar reducciones brutas de hasta un 70 % en ciertas categorías de costes.

No obstante, dado que estos ahorros se verán parcialmente compensados por el aumento de los costes tecnológicos, McKinsey prevé que el efecto neto en la base de costes agregada de los bancos será una disminución del 15 al 20 %.

El informe señala que el impacto de estos ahorros no durará y, al igual que con innovaciones anteriores, es probable que la competencia erosione las ganancias de los bancos y la mayoría de los beneficios se acumularán con el tiempo para los clientes.

McKinsey ve probable que, a largo plazo, la IA erosione la rentabilidad bancaria a medida que los consumidores comiencen a utilizar habitualmente agentes de IA para optimizar sus finanzas, por ejemplo transfiriendo automáticamente depósitos a cuentas con mayor rendimiento.

El informe señala que la IA con agentes, la denominada IA agéntica, podría revolucionar los depósitos y los préstamos con tarjetas de crédito, sobre todo al romper la inercia del cliente.

Actualmente del total mundial de 70 billones de dólares en depósitos de consumidores, 23 billones están en cuentas corrientes con tasas cercanas a cero y el resto en cuentas que ofrecen tasas de ahorro relativamente bajas.

Según el estudio, si tan sólo entre el 5 y el 10 % de los saldos de las cuentas corrientes migraran a las tasas más altas del mercado, una acción que podría ser impulsada por agentes de IA, eso reduciría las ganancias totales por depósitos del sector bancario en un 20 % o más.

Asimismo, el informe señala que si los bancos no reorientan sus modelos de negocio para adaptarse, durante la próxima década los fondos de beneficios bancarios en el mundo podrían disminuir en 170.000 millones de dólares o un 9 %, lo cual McKinsey señala que es suficiente para situar la rentabilidad media por debajo del coste del capital.

Los efectos no serán sentidos por igual por todos los bancos y los pioneros de la IA podrían ver aumentar su rentabilidad sobre el capital tangible (ROTE) hasta en cuatro puntos porcentuales, al aprovechar su liderazgo para reinventar modelos y capturar valor.

Por el contrario, el informe ve probable que los bancos de menor crecimiento tengan menores beneficios a largo plazo.

Además, explica que la IA agencial tiene el potencial de transformar radicalmente la banca y no necesariamente en beneficio del sector en su conjunto.

Así, aunque podría generar eficiencias sin precedentes y nuevo valor para el cliente, sin una adaptación decisiva por parte de los bancos, podría erosionar las fuentes de beneficios tradicionales.

McKinsey prevé que surja un modelo de negocio agéntico innovador en los próximos tres a cinco años, lo que marcará un punto de inflexión, y que en ese plazo de tiempo emerjan bancos nativos en IA capaces de ganar cuota de mercado con rapidez frente a las entidades tradicionales.

Además, el informe señala que el proceso de las decisiones de los clientes bancarios ha cambiado sustancialmente y, por ejemplo, en Estados Unidos, sólo el 4 % de los nuevos solicitantes de tarjetas de crédito eligen su banco actual sin explorar primero alternativas, en comparación con el 10 % que lo hacía en 2018.

En el caso de las cuentas corrientes, aún es mayor la diferencia y el 4 % de las aperturas de cuentas en Estados Unidos provienen de la fidelización, frente al 25 % en 2018. EFECOM