Peramato se estrena como fiscal general del Estado expresando su "admiración" a García Ortiz

Julio Cano Antón, procedente de la Fiscalía en las Islas Baleares, fue anunciado como nuevo secretario técnico de la Fiscalía General del Estado en el marco de una estrategia de renovación interna, en sustitución de Ana García de León, quien recibió palabras de reconocimiento por su papel durante un periodo especialmente activo en términos legislativos y doctrinales. Esta designación encabeza los ajustes en el equipo directivo en un momento en el que Teresa Peramato asumió oficialmente el cargo de fiscal general del Estado, según publicó Europa Press. Durante la ceremonia, que se celebró en el Tribunal Supremo, Peramato situó la lucha contra la violencia de género como prioridad inmediata de su mandato y detalló cambios estratégicos para incrementar la eficacia y la cohesión institucional.

La nueva fiscal general, de acuerdo con lo informado por Europa Press, enmarcó su nombramiento en un contexto social afectado por el registro de 1.340 mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas desde 2003 y 45 muertes contabilizadas solo en lo que va de año. En declaraciones realizadas durante su intervención, Peramato apeló tanto a la sociedad civil como a las instituciones públicas a adoptar una posición firme ante la violencia y el acoso sexual, a los que calificó como retos relevantes para el Estado y para la sociedad en su conjunto. Reiteró la urgencia de una movilización conjunta y sostenida, anunciando que las reformas para acercar el sistema judicial al ciudadano y reforzar la acción del Ministerio Público constituirán uno de los ejes de su gestión.

La ceremonia de toma de posesión reunió a varios de sus predecesores en la Fiscalía General del Estado, como Álvaro García Ortiz, Dolores Delgado, María José Segarra y Eduardo Torres-Dulce. Peramato reconoció la contribución de todos ellos a la estructura actual de la institución, destacando los cimientos sobre los que se apoyará la nueva etapa. Durante el acto, tal como consignó Europa Press, Peramato también aludió a la crisis que atraviesa la Fiscalía tras la condena al ex fiscal general Álvaro García Ortiz, sancionado con dos años de inhabilitación por la revelación de secretos en el caso Alberto González Amador. Señaló la necesidad de restaurar la confianza interna y urgió a los fiscales a colaborar para recuperar la estabilidad institucional.

El nombramiento de Cano Antón fue justificado por Peramato en base a su experiencia y trayectoria, dimensiones que, según argumentó, fortalecerán el proceso de transformación institucional y la cohesión del Ministerio Público. En esta línea, destacó la importancia de la especialización dentro de la carrera fiscal como garantía para aportar eficacia y rigor en el ejercicio de las funciones. Recalcó también la necesidad de consolidar el Ministerio Público como cuerpo unificado, con objetivos claros y una misión compartida, dando relevancia a la escucha activa, el diálogo y la búsqueda de consensos internos para afrontar los desafíos institucionales.

Dentro de las prioridades programáticas mencionadas, según detalló Europa Press, figuran la defensa de los derechos humanos y el impulso de la cooperación internacional. Entre los objetivos principales, Peramato subrayó la lucha contra la violencia de género y sexual, la trata de personas, los delitos de odio, la discriminación y los delitos ambientales, prestando atención especial al negacionismo del cambio climático. Además, indicó que el narcotráfico, la corrupción administrativa y los delitos económicos que afectan los sistemas de bienestar también ocuparán un lugar destacado en la agenda. Añadió que la Fiscalía dedicará atención prioritaria a la protección de sectores vulnerables como menores, ancianos, personas con discapacidad y migrantes.

Peramato remarcó la necesidad de fortalecer la autonomía institucional de la Fiscalía, resaltando ámbitos como la gestión presupuestaria, la formación continua, la digitalización, la organización interna y los recursos económicos. Sostuvo que estos ámbitos resultan esenciales para que la Fiscalía represente adecuadamente la diversidad social y garantice el acceso igualitario a la justicia, según indicó Europa Press.

En cuanto al modelo procesal penal, defendió la reforma legislativa para que el Ministerio Público asuma la dirección de la investigación penal, quitando esta responsabilidad a la función judicial. Según reportó Europa Press, Peramato justificó la necesidad de este cambio argumentando que permitiría agilizar el sistema procesal y proporcionaría mejores garantías a las partes. Valoró que la Fiscalía está preparada para asumir este liderazgo y consideró que la reforma sería fundamental para modernizar el sistema judicial y acercar la justicia a la ciudadanía.

En su intervención, Peramato incluyó referencias personales y culturales, reconociendo la influencia de su madre y el apoyo de su familia durante su carrera. Apoyándose en citas de Miguel de Unamuno y Eleanor Roosevelt, subrayó la relevancia de la renovación y el impulso de ideales en el desempeño institucional. Además, puso en valor el compromiso y el trabajo de los 2.804 fiscales en activo, afirmando que la fortaleza del Ministerio Público reside en la diversidad y en la labor conjunta de todos sus integrantes.

Europa Press resaltó que Peramato ubicó el fomento de la cohesión interna como lema principal de su gestión, haciendo hincapié en la participación y consulta dentro de la Fiscalía mediante la escucha activa, el debate y la búsqueda de consenso para la toma de decisiones estratégicas. Se comprometió también a consolidar el modelo colegiado, atribuyendo al Consejo Fiscal y a la Junta de Fiscales de Sala una función determinante en los procesos de deliberación profesional y en la definición de criterios institucionales.

La nueva fiscal general abordó, según publicó Europa Press, la imperante necesidad de que las políticas y actuaciones del Ministerio Público se adapten a la transformación social, lo que implica interpretar y aplicar las normas a una sociedad en constante cambio. Al referirse a los desafíos de la institución, apostó por una modernización que incluya mecanismos de participación, capacitación técnica y adaptación tecnológica al servicio de los objetivos públicos.

Durante la ceremonia, Peramato expresó su “admiración” por Álvaro García Ortiz, según recogió Europa Press, un gesto que formó parte de su intervención ante autoridades judiciales y compañeros de carrera, subrayando el papel de quienes la precedieron en la Fiscalía General del Estado. Las intervenciones de la nueva fiscal general enfatizaron el fortalecimiento institucional y el diseño de estrategias orientadas a responder a los retos sociales y jurídicos actuales, enfocándose en garantizar los derechos fundamentales y el acceso a la justicia para toda la sociedad.