El Gobierno invierte más de 26 millones en vehículos pesados todoterreno para el sistema antiaéreo 'Nasams'

Defensa da luz verde a la compra de modernos transportes para potenciar la movilidad en misiones militares, además de autorizar fondos adicionales para equipos de mantenimiento y logística, según confirmó el Consejo de Ministros este martes

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La reciente autorización para la compra de una serie adicional de vehículos pesados todoterreno por parte del Ministerio de Defensa forma parte de un amplio paquete de inversiones aprobado por el Consejo de Ministros, dirigido a fortalecer la capacidad de movilidad táctica del Ejército de Tierra y el Ejército del Aire y del Espacio. Según consignó el medio, esta compra se integra en el marco del programa de modernización del sistema de defensa antiaérea 'Nasams'. Además, el Consejo dio luz verde a nuevos fondos para el mantenimiento y la logística de equipos militares, en respuesta a necesidades operativas identificadas en la flota de aeronaves y unidades terrestres.

De acuerdo con lo publicado, la operación principal alcanza los 26.665.776 euros, destinados a la adquisición de vehículos pesados todoterreno que permitirán la plena operatividad del 'Nasams', un sistema de misiles antiaéreos de alcance medio y bajo, caracterizado por su capacidad para ser desplegado en distintos escenarios. Este contrato, que no contempla posibilidad de prórroga, estará vigente hasta el 30 de noviembre de 2027. El Ministerio de Defensa subrayó mediante una comunicación que la finalidad del acuerdo es asegurar la movilidad necesaria para cumplir las misiones asignadas y dotar al Ejército del Aire y del Espacio de una batería adicional de este sistema de defensa.

Tal como informó el medio, dentro del mismo programa, Defensa cerró la compra de vehículos pesados todoterreno a la empresa Urovesa por un montante adicional de 11,27 millones de euros, tal y como detalló el portal de contratación del Estado el 24 de noviembre. Los vehículos adquiridos servirán para ampliar y renovar la flota destinada al apoyo del sistema antiaéreo, cumpliendo las exigencias de operatividad en los despliegues tanto nacionales como internacionales.

Otro de los puntos aprobados por el Consejo de Ministros fue la modificación de contrato con la Agencia de Apoyo y Adquisiciones de la OTAN (NSPA), que permitirá la incorporación de bancos automáticos de prueba de propósito general, apoyados en el Sistema Automático de Mantenimiento estándar (SAMe), así como la migración de varios programas de test. Esta operación, valorada en 26 millones de euros, responde a las necesidades adicionales de mantenimiento identificadas en el avión F-18 (C-15), ante la previsión de vida útil extendida de estos aparatos. Defensa explicó al medio que "algunos subsistemas requerirán de un mantenimiento adicional con el que inicialmente no se contaba, lo que hace necesario la adquisición de bancos y programas adicionales para preservar las capacidades actuales de soporte y operatividad de estos sistemas".

El paquete aprobado también incluye la celebración de un Acuerdo Marco para la compra de cubiertas para vehículos de dotación del Ejército de Tierra. Según precisó el Ministerio de Defensa, la cuantía destinada a este fin es de 12.396.694,20 euros, cubriendo un período de dos años desde la formalización y con prórroga posible por un tercer año. Defensa argumentó ante el medio que estos materiales resultan críticos para asegurar la función logística de movimiento y transporte en todos los escenarios donde operan las diversas unidades del Ejército. Así, se busca mantener la operatividad y asegurar la capacidad de respuesta ante las demandas de la Defensa y Seguridad Nacional.

El Consejo de Ministros sostuvo que todas estas inversiones tienen como trasfondo el refuerzo de la capacidad operativa y de respuesta de las fuerzas armadas, en un contexto en el que la movilidad, la logística y el mantenimiento de los sistemas avanzados se posicionan como ejes fundamentales en el cumplimiento de misiones nacionales e internacionales. Según la información proporcionada, la estrategia se centra en dotar a las unidades de recursos críticos para ejecutar su labor y asegurar la continuidad de los programas de modernización tecnológica en la defensa.