Vox pide suspender la compra e instalación de radares de tráfico de origen chino por "riegos de ciberseguridad"

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Vox ha registrado una proposición no de ley en la Comisión sobre Seguridad Vial del Congreso para instar al Gobierno a suspender de forma inmediata la compra, instalación y renovación de contratos de radares y cámaras de vigilancia fabricados o con componentes chinos vetados internacionalmente "por motivos de seguridad nacional y ciberseguridad".

La iniciativa, recogida por Europa Press, solicita también "realizar una auditoría técnica y jurídica independiente sobre todos los dispositivos de control de tráfico de origen extranjero instalados en España, con especial atención a los de procedencia china".

Según la formación dirigida por Santiago Abascal, desde 2022 la Dirección General de Tráfico, policías autonómicas y diversos ayuntamientos han instalado cámaras y radares de velocidad de fabricación y tecnología china "que podrían plantear problemas de ciberseguridad, así como lesionar la soberanía española en materia de datos".

VETADAS EN OTRAS PAÍSES OCCIDENTALES

El grupo parlamentario señala que determinadas empresas chinas han sido vetadas en países como Estados Unidos, Dinamarca, Países Bajos, Lituania o Australia y menciona informes del Centro Nacional de Inteligencia y del Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas que alertan de los riesgos vinculados al uso de ciertas tecnologías asiáticas, así como del incremento de "las actividades de ciberespionaje desarrolladas por grupos de hackers relacionados con China".

Por todo ello, Vox reclama al Ejecutivo que adopte "una actitud prudente" y que actúe para garantizar la seguridad vial, la ciberseguridad y los intereses nacionales "frente a posibles amenazas derivadas del uso de dispositivos extranjeros en infraestructuras críticas".