Almería, 1 ago (EFE).- El Tribunal Supremo ha confirmado la condena a 38 años de prisión impuesta a un hombre que mató a cuchilladas al tío de su exmujer y trató de asesinar a su exsuegra en su vivienda de Roquetas de Mar (Almería), adonde fue para robar dinero y joyas.
El alto tribunal ha rechazado el recurso de casación de la defensa del acusado y ha declarado firme la sentencia de la Audiencia de Almería en marzo de 2024, que fue ratificada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía el pasado noviembre.
Los hechos se remontan al 3 de enero de 2021, cuando el condenado fue a casa de su exsuegra, con la que había convivido años atrás en el edificio, con el pretexto de recoger unas zapatillas de su hijo. Ocultaba un cuchillo de grandes dimensiones y actuó con intención de apoderarse de dinero y joyas que sabía que guardaban en la vivienda.
Según el veredicto del jurado popular, el acusado fue al dormitorio de la mujer y comenzó a rebuscar en un armario, de donde sacó una caja con objetos de valor. Fue sorprendido por su exsuegra, que le recriminó lo que hacía, momento en el que sacó el cuchillo y se lo clavó en el costado derecho con ánimo de matarla.
Se dirigió al salón, donde estaba sentado en un sillón el hermano de la mujer, y le asestó seis puñaladas, tres de ellas en la zona precordial, que le seccionaron la aurícula derecha del corazón. La víctima murió en el acto sin posibilidad de defensa.
La agresión fue presenciada por la hija de la mujer agredida, expareja del acusado, que acudió alertada por su madre y ayudó a estabilizarla. La mujer, enfermera de profesión, encontró a su tío ya fallecido en el sillón. También se encontraba en la vivienda otra hija con discapacidad.
La víctima sobreviviente sufrió lesiones de riesgo vital en el hemitórax y el abdomen, y requirió cirugía urgente. El proceso de curación se prolongó durante 234 días, con ocho días muy graves y más de doscientos moderados, con secuelas de trastorno mental agravado, hernia umbilical y perjuicio estético moderado.
El acusado huyó del lugar con 1.000 euros en efectivo y la caja con las joyas, valoradas en 3.945 euros y fue localizado poco después en un prostíbulo de Roquetas con los objetos robados.
Por estos hechos, se le impuso una condena de 23 años de prisión por un delito de asesinato en concurso con robo con violencia en casa habitada y uso de armas, y 15 años más por un delito de asesinato en grado de tentativa, con la agravante de parentesco.
La sentencia incluye dos órdenes de alejamiento durante 23 y 20 años respecto de la víctima sobreviviente, su hija y su otra hija con discapacidad. Además, deberá indemnizar con 120.000 euros a los herederos del fallecido, con 90.000 euros a la mujer agredida, y con 200 euros por el dinero sustraído.
El Supremo rechaza en su sentencia que se haya vulnerado el derecho a la presunción de inocencia, que se haya roto la cadena de custodia del cuchillo ni que concurra eximente alguna por consumo de alcohol o drogas. La Sala destaca que el ataque fue sorpresivo, que las víctimas no tuvieron posibilidad de defenderse y que la prueba fue “contundente”. EFE
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