Ginebra, 18 jun (EFECOM).- España es el 18º país del mundo que está mostrando mayor avance hacia la transición energética, según el listado publicado este miércoles por el Foro Económico Mundial (WEF), lo que supone un descenso de dos puestos respecto a 2024 pero todavía le deja en una posición destacada entre las 118 economías estudiadas.
Suecia ocupó, como el año pasado, la primera posición, seguida de Finlandia, Dinamarca, Noruega y Suiza, mientras que China ascendió al puesto duodécimo y Estados Unidos al decimoséptimo.
Brasil, en 15ª posición, fue la economía latinoamericana mejor posicionada, seguida por Chile (21ª), Uruguay (35ª) y Colombia (38ª).
WEF, entidad organizadora del encuentro de líderes de Davos a principios de cada año, destacó que el camino hacia una energía "segura, equitativa y sostenible" se está acelerando tras años de estancamiento, aunque advirtió de que las tensiones geopolíticas y la falta de inversiones pueden poner en riesgo los avances.
Un 65 % de los países estudiados mejoró sus notas en el índice, y WEF destacó que en 2024 se acumularon inversiones en energías limpias por valor de 2 billones de dólares, lo que no evitó que el pasado año se registraran emisiones récord de gases de efecto invernadero de 37.800 millones de toneladas.
Uno de los factores de este aumento fue la subida de un 2,2 % de la demanda energética global, impulsada por las necesidades de la inteligencia artificial, los centros de datos o los sistemas de refrigeración y electrificación, analizó WEF.
Al presentar el ránking, la institución destacó que mientras el 80 % del aumento de la demanda de energía proviene de países emergentes y en desarrollo, el 90 % de las inversiones en fuentes más respetuosas con el medio ambiente se concentra en naciones desarrolladas y China, mostrando un claro desequilibrio.
La organización recordó incidentes como el apagón generalizado que sufrieron el 28 de abril España y Portugal, algo que, de acuerdo con WEF, "muestra que incluso economías desarrolladas son vulnerables a la inestabilidad de las redes", algo que debe compensarse con inversión en almacenamiento, en transmisión, y mayor comercio energético. EFECOM