Piden 5 años de cárcel para acusada de insultar, amenazar y lesionar a unos vecinos gays

La Fiscalía imputa delitos de insulto, amenazas y lesiones a una mujer por agredir a una pareja de hombres entre 2013 y 2018, solicitando 5 años y 3 meses de prisión

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Madrid, 30 may (EFE).- La Fiscalía pide 5 años y 3 meses de cárcel para una mujer que será juzgada a partir del lunes acusada de insultar, amenazar de muerte y lesionar a una pareja de vecinos integrada por dos hombres, todo por su rechazo hacia su orientación sexual.

Según ha informado la Fiscalía de Madrid, el juicio está fechado para el próximo lunes y de cara al mismo el Ministerio Público imputa a la acusada un delito contra la dignidad en concurso con dos delitos contra la integridad moral, un delito de amenazas y dos delitos de lesiones.

Pide para ella un total de 5 años y 3 meses de cárcel, multa de 2.970 euros, que se le prohíba dedicarse a actividades educativas o deportivas por 8 años y que no se acerque a las víctimas durante 5 años. También que les indemnice con 2.000 euros por daños morales.

El escrito de acusación relata que M. Á. M. M., "movida por sus prejuicios" que sentía hacia una pareja de vecinos formada por dos hombres, les mostró desde 2013 hasta 2018 su "rechazo de forma despectiva por su orientación sexual".

Cuando se cruzaba con ellos en el descansillo, el portal y las restantes zonas comunes les espetaba, "siendo audible para los restantes vecinos", expresiones como "mariconas", "chulos de mierda" o "maricón desgraciado". Llegó a amenazarles de muerte y a decirles que les echaría de la comunidad.

En una ocasión la acusada, "guiada por los mismos prejuicios y con un ánimo de menoscabar su sentimiento de tranquilidad y de seguridad", llegó a exhibir ante las víctimas una barra metálica e hizo ademán de golpearles, añade el Ministerio Público.

Para la Fiscalía esta conducta es "degradante y despreciativa" y constituye un atentado a la dignidad de esas y del colectivo en el que se integran.

Uno de los denunciantes aseguró que sufrió una elevación de la tensión física y emocional que le afectó de forma aguda en el sueño y la calidad de su descanso, así como en su actividad habitual, y le obligó a ser tratado con ansiolíticos.

El otro afectado sufrió una alteración del sueño y tuvo que ser tratado con ansiolíticos, añade la Fiscalía. EFE