
El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, ha defendido este miércoles "la necesidad de un cambio profundo" del modelo de proceso penal, que implicará que la investigación pase de los jueces a los fiscales, a pesar de los "miedos" que pueda generar este desafío, si bien ha asegurado que los fiscales son "plenamente capaces" de asumirlo.
Así lo ha transmitido en la ceremonia de bienvenida de la 32ª Asamblea General Ordinaria de la Asociación Iberoamericana de Ministerios Públicos (AIAMP), donde ha explicado que la Fiscalía española "crecerá" para "superar el modelo presente ante la necesidad de un cambio profundo en la configuración del modelo de proceso penal".
García Ortiz ha sostenido que esta nueva configuración "no solo viene impuesta por exigencias de orden constitucional sino también por la voluntad política compartida de modernizar y mejorar nuestro sistema de administración de justicia". "Coherente con nuestra pertenencia al espacio normativo de libertad y justicia de la Unión Europea, un proceso penal constitucional", ha añadido.
No obstante, se ha mostrado consciente de que "las trasformaciones son siempre desafíos que generan inquietud y miedos, que a veces se disfrazan de certezas absolutas que son imposibles de atender, y a las que solamente la voluntad de cambio y la imperiosa necesidad de avanzar puede vencer".
"Es fácil quedarse en las palabras o en los lamentos, pero puedo afirmar con plena convicción que las y los fiscales de este país estamos dispuestos y somos plenamente capaces de asumir los retos que la sociedad y el legislador nos proponen. Lo haremos con la profesionalidad, la excelencia y la lealtad a la norma y a la institución que nos definen", ha aseverado.
En este sentido, ha reivindicado que las fiscalías son "instituciones fuertes, sólidas e independientes, comprometidas con el Estado de Derecho", "dispuestas a resistir los vientos de quienes no comparten la necesidad de cambio, de quienes ven el futuro como una amenaza, no como una necesidad".