Madrid, 28 may (EFECOM).- El sector de ladrillos y tejas facturó 719 millones de euros en 2024, lo que supone un descenso del 0,1 % respecto al ejercicio anterior y marca una clara estabilización después de que un año antes la caída de los ingresos se disparara hasta el 15 %.
Esa estabilización de la facturación tuvo lugar pese a que la producción cayó un 2,4 % interanual, hasta los 5,45 millones de toneladas, según datos facilitados este miércoles por la Asociación Española de Fabricantes de Ladrillos y Tejas de Arcilla Cocida (Hispalyt) en rueda de prensa.
El sector cerró 2024 con 4.877 empleados, un 1,8 % más que en 2023, en línea con el aumento de empleo que se viene observando desde 2018.
La asociación ha resaltado también la estabilización en el número de empresas del sector, que se mantiene en 130 desde 2020, lejos de las 300 compañías activas en 2014.
El vicepresidente de la patronal, Francisco Rodríguez, ha subrayado que la exportación del sector ha sido de 92,46 millones, el 10 % del valor de la producción nacional. En los últimos 10 años las ventas de ladrillos y tejas al extranjero han crecido un 90 %.
De esta manera, España es el cuarto país de Europa con mayor exportación de productos cerámicos dentro de la Unión Europea, por detrás de Bélgica, Alemania y Países Bajos.
Los principales destinos de la cerámica estructural española son Francia, Reino Unido, Estados Unidos, Australia, Nueva Zelanda, Portugal y Bélgica.
Por tipo de producto, los ladrillos y bloques para revestir coparon el 80,64 % de la producción, seguidos de las tejas, con un 7,81 %; y los ladrillos de cara vista, que registran el 5,51 %.
Rodríguez ha profundizado en el problema estructural de falta de vivienda y ha afirmado que la lentitud en el desbloqueo de suelo edificable es un obstáculo significativo para el desarrollo de nuevos proyectos, ya que esta carencia hace que el precio se dispare.
"Se tarda una media de 15 años en gestionar y transformar un suelo hasta que se pone el primer ladrillo de una promoción y solo 2 años en construir las viviendas", ha recordado, a la vez que ha advertido de que la construcción industrializada no es la solución al problema debido al riesgo de que se haga con una bajada en la calidad de los materiales.
En este sentido, ha reivindicado la reactivación de la vivienda pública con un modelo constructivo basado en materiales de calidad y el papel del ladrillo cerámico en el PERTE de industrialización de la vivienda.
La patronal también ha expresado su tranquilidad frente al cambio de normativa en el código técnico de la edificación en materia de protección frente a incendios y ruido, porque afirman que los materiales cerámicos tienen la mejor respuesta ante estos elementos. EFECOM