Santander, 22 may (EFE).- La magistrada presidenta del tribunal de jurado que el pasado marzo condenó a 25 años de prisión y a prisión permanente revisable a un hombre por el asesinato de su pareja y de la hija de ambos en Liaño (Cantabria) ha acordado prorrogar su prisión provisional.
El condenado, José Reñones, no está cumpliendo aún esa condena y se encuentra en prisión como medida cautelar.
La razón es que la sentencia aún no es firme al haber sido recurrida en apelación ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria, recuerda este órgano en un comunicado.
El pasado viernes la magistrada de la Audiencia de Cantabria celebró una comparecencia con la Fiscalía, las acusaciones particulares, la acusación popular y la defensa del condenado para abordar la prórroga de esta medida, que vence en diciembre.
En un auto dado a conocer hoy, la juez explica que "no hay razón para modificar lo ya acordado" respecto a la situación personal del condenado, ya que continúan los motivos que dieron lugar a imponer la medida de prisión provisional.
La magistrada de la Audiencia cántabra señala que "el riesgo de fuga es elevadísimo".
Recuerda "la elevadísima pena privativa de libertad impuesta" y añade la falta de arraigo personal de Reñones, ya que siendo español y teniendo familia "no constan vínculos con ellos que hagan suponer que hay una dependencia económica y sentimental".
Junto a ello, el auto indica que la vista en la Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria para ver el recurso de apelación contra la sentencia que le condenó está señalada para el próximo 10 de junio, por lo que es "esencial garantizar su presencia en dicho acto".
"Entendemos que, por todo ello y con la finalidad de asegurar que no se sustraiga de la acción de la justicia, procede la prórroga de la prisión provisional hasta la mitad de la pena efectivamente impuesta", señala.
El juicio contra José Reñones fue el pasado febrero con un jurado popular y, tras ser declarado culpable del doble crimen por unanimidad, fue condenado a 25 años de cárcel por matar a la que había sido su pareja y a prisión permanente revisable por la muerte de su hija.
Es la primera vez que se impone esta pena de prisión permanente revisable en Cantabria.
Reñones fue condenado por dos delitos de asesinato con la concurrencia de la circunstancia agravante de parentesco y, además, en el caso de la muerte de su pareja, de la agravante de discriminación por razón de género.
EFE
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