Logroño, 25 may (EFE).- Los observatorios del español y centros dedicados al estudio de esta lengua han constituido una red que les permita coordinar su trabajo e intercambiar criterios en cuestiones de metodología y objetivos en distintos campos de uso de este idioma, como los medios digitales, las industrias culturales, la enseñanza o el hispanismo.
Esta es una de las principales conclusiones de la Conferencia Internacional del Observatorio de las Lenguas y las Culturas, organizada por el Observatorio Global del Español, liderado por el Instituto Cervantes, en colaboración con el Gobierno de La Rioja, y que se celebrado desde este lunes, 19 de mayo, hasta este miércoles en Logroño y en Centro Internacional de Investigación del Español (Cilengua), en San Millán de la Cogolla.
Según ha informado a EFE el director del Observatorio Global del Español y coordinador de estas jornadas, Francisco Moreno, se trata de una red de colaboración de observatorios de las lenguas y las culturas, con el foco especial en el español, pero también con atención a las que conviven con ella en diferentes espacios geográficos, sociales e, incluso, virtuales.
Los representantes en estas jornadas, procedentes de siete países, han redactado y firmado un decálogo que contiene intenciones y buenas prácticas para garantizar que esa cooperación va a tener un respaldo formal y que refleja la constitución oficial de la red, ha indicado.
Lo han suscrito 16 representantes de observatorios y centros de análisis de España, Alemania, Argentina, Brasil, México, Estados Unidos y Japón.
Entre los puntos que recoge el decálogo, está que la observación de las lenguas, las culturas y la comunicación es necesaria para disponer de informaciones veraces y confiables sobre las dinámicas comunicativas y socioculturales de las sociedades contemporáneas.
Esta observación se fundamenta en la libertad, la ética y el rigor científico y académico en cuanto a sus métodos y procedimientos de análisis, recoge otro de los puntos.
También incluye que los centros dedicados a la observación del español transmitirán valores de convivencia y de respeto a las identidades culturales y lingüísticas, propias y ajenas, tanto en los entornos físicos como en los digitales.
Coordinarán sus trabajos con el fin de hacerlos complementarios y no repetitivos, sin perjuicio de abordar temas similares desde perspectivas o epistemologías diversas.
También intercambiarán materiales e informaciones para dar una mayor dimensión a sus trabajos y alcanzar interpretaciones más amplias y documentadas.
Entre sus principios, también están que respetarán en sus informes y actividades el principio de transparencia, procurarán actuar de acuerdo con los principios de la ciencia abierta y pueden recurrir a estrategias de la misma para fundamentar sus trabajos en conocimientos compartidos y hacerlos más cercanos a la sociedad.
El Observatorio Global del Español reservará un espacio en su página web, donde esta red de centros ofrecerá el contenido de sus actividades y los resultados de colaboraciones. EFE