València, 21 may (EFE).- La Fiscalía Provincial de Valencia ha decidido archivar la denuncia presentada por Compromís el pasado mes de octubre por supuestas terapias homófobas de conversión que habrían estado aplicando colegios diocesanos.
En un escrito fechado el pasado 15 de abril, al que ha tenido acceso EFE, la fiscal que ha examinado el caso ha resuelto que no es posible aseverar la existencia de delito, si bien ha remitido las actuaciones a la Conselleria de Educación ante la posibilidad de que se haya incurrido en una infracción administrativa.
La denuncia de Compromís apuntaba al posible delito de odio contra la comunidad Lgtbi por parte de la Fundación San Vicente Mártir Colegios Diocesanos.
Sin embargo, la fiscal no ha observado, en esta causa denunciada por Compromís, "actos de incitación, promoción o favorecimiento del odio, violencia o discriminación u hostilidad contra el colectivo afectado, en este caso las personas Lgtbi".
"Investigados los hechos por la Policía Nacional, no se ha logrado identificar a ninguna persona que haya sido sometida a algún tipo de terapia de conversión o reversión por los denunciados, por lo que no consta víctima alguna identificada policialmente cuya dignidad o integridad moral se haya visto lastimada o menoscabada", añade la fiscal en su escrito.
Sin embargo, en una web de las mencionadas por Compromís, sí que observa el Ministerio Público que se "ofertan cursos y publicaciones en las que se presenta la homosexualidad como producto de traumas y de una incorrecta maduración, y se propone la intervención pastoral y terapéutica para atajar las causas y recuperar la masculinidad o feminidad heterosexual natural".
Es por ello, considera la fiscal, que la autoridad autonómica competente deberá determinar si existe o no una infracción administrativa de la ley 23/2018 de igualdad de las personas Lgtbi en la Comunitat Valenciana.
Esta ley contempla como falta muy grave la realización, difusión o promoción de terapias o pseudoterapias de conversión destinadas a modificar la orientación o identidad sexual.
El pasado 11 de febrero el arzobispo de Valencia, Enrique Benavent, suspendió la actividad del Centro de Orientación Familiar Mater Misericordiae, sobre el que Compromís denunció que era "uno de los núcleos neurálgicos de las terapias de conversión", y anunció que se realizaría "una revisión en profundidad de sus actividades y una reforma estructural".
El Arzobispado informó sobre esta decisión en un comunicado en el que no se aludía a la denuncia de Compromís y donde explicaba que la determinación de revisar las actividades de este centro y su reforma habían supuesto la renuncia de su director, Federico Mulet, que había sido aceptada por Benavent. EFE