Briviesca (Burgos), 21 abr (EFE).- Las exmonjas del Monasterio de Belorado (Burgos) Susana Mateo (sor Sión) y Zaida Pinar (sor Myriam) han defendido la legalidad de la operación de venta de 1,73 kilos de oro propiedad del convento por valor de 130.000 euros, que gestionó el pasado enero la exabadesa, Laura García de Viedma, en su declaración de este lunes en el Juzgado de Briviesca.
Mateo y Pinar, dos de las diez monjas del cenobio burgalés que fueron excomulgadas el 22 de junio de 2024 después de anunciar su salida de la Iglesia católica, han acudido a los juzgados en calidad de investigadas, igual que hizo el pasado 4 de abril la exabadesa, en un proceso abierto por estafa indebida.
El abogado de las religiosas, Enrique García de Viedma, ha explicado en declaraciones a los medios a las puertas de la sede judicial que las exreligiosas han defendido que la operación de venta de oro "está dentro de la normalidad" y que no hubo "ningún tipo de engaño ni acto fraudulento".
"No hay ningún tipo de acto que entendamos que es ilícito", ha insistido, tras la investigación abierta por la Policía Nacional después de que en enero Laura García de Viedma vendiera 1,73 kilos de oro, que la comunidad religiosa había comprado en 2020 como una operación de inversión.
La venta se realizó por 130.000 euros, de los cuales 66.000 euros fue en líquido -el resto se destinó a pagar intereses de la entidad crediticia-, cantidad que gestionó la exabadesa como representante legal de la comunidad religiosa, representación que está en cuestión desde el nombramiento del arzobispo Mario Iceta como comisario pontificio de los monasterios de Belorado, Derio y Orduña.
El letrado ha asegurado que tanto la compra de oro como la venta se hizo con el conocimiento y el consentimiento de todas las religiosas, y no ha querido precisar por qué se ha llamado a declarar como investigadas a Susana Mateo y Zaida Pinar, tras haberlo hecho también el pasado 4 de abril la exabadesa.
García de Viedma ha indicado que no tienen constancia de que se vaya a investigar a ninguna de las otras exreligiosas, ni que haya más declaraciones previstas, después de que hayan pasado por el juzgado responsables de la entidad crediticia en la que estaba depositado el oro.
Susana Mateo ha explicado, a preguntas de los periodistas, que tanto ella como Zaida Pinar han pasado la noche en el convento de Belorado para poder acudir, a las 12:30 de este lunes, a declarar a Briviesca, pues ellas son dos de las tres exreligiosas que están en Arrionadas (Asturias), a cargo del restaurante "de clausura" abierto el pasado febrero.
"Hemos visto a las hermanas" que residen en Belorado y, tras declarar, vuelven a Asturias.
Las exreligiosas se enfrentan, además, a una demanda de desahucio de los monasterios de Belorado y Derio, interpuesta por el Arzobispado de Burgos, cuya vista oral tendrá lugar el 13 de mayo.
De las diez monjas excomulgadas, dos abandonaron el monasterio el pasado verano, y las ocho restantes están distribuidas entre Arriondas (tres), Orduña (dos) y Belorado (tres), donde además atienden a las cinco mayores, que no están excomulgadas.
Preguntada Susana Mateo por la muerte del papa Francisco, al que las exmonjas acusaban de hereje en el manifiesto católico que acompañó a su anuncio de salida de la Iglesia, ha indicado que venía preparada para la declaración y "de lo demás, la verdad, no le ha dado ni tiempo" a saber. EFE
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