Stellantis comienza a reembolsar el coste de las averías de los motores Puretech

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Madrid, 16 abr (EFECOM).- Stellantis ha comenzado a reembolsar el coste de las averías provocadas por fallos en los motores Puretech y ha abonado hasta el momento unos 170.000 euros a los afectados, según la Asociación de Afectados Stellantis (Afestel).

A través de un comunicado, esta asociación ha detallado que desde marzo el fabricante ha abonado 170.000 euros en devoluciones mediante acuerdos extrajudiciales en respuesta a las demandas que se han ido interponiendo, con previsión de alcanzar los 2,5 millones en las próximas semanas.

Estas cantidades "representan sólo el inicio de lo que puede llegar a ser un elevadísimo montante en indemnizaciones, teniendo en cuenta los cientos de miles de perjudicados" asegura Afestel.

Según esta agrupación, que representa a más de 8.500 personas, el fallo de los motores afecta a más de 750.000 vehículos en España y a más de 4 millones en Europa.

Los modelos implicados incorporan versiones del motor Puretech 1.2 litros de tres cilindros, fabricado entre 2013 y 2022, presente en marcas como Peugeot, Citroën, Opel y DS. Las averías más frecuentes se deben al deterioro prematuro de la correa de distribución, lo que puede generar daños graves en el motor.

Estos acuerdos suponen un alivio económico para muchos propietarios que han afrontado reparaciones costosas por problemas de fábrica del vehículo, ajenos al posible deterioro derivado del uso.

“Las autoridades deberían exigir que se dejen de vender coches con los motores Puretech”, defiende el presidente de Afestel, Yerba Luca de Tena, en referencia a la falta de reconocimiento oficial por parte de Stellantis de este defecto de fabricación.

La asociación mantiene su estrategia judicial con cerca de 250 demandas presentadas ante los juzgados de Vigo, donde la multinacional cuenta con una sede operativa.

Los abogados de la plataforma confían en alcanzar más acuerdos pese a que, según denuncian, la empresa no está acudiendo a los actos de conciliación ni respondiendo a las comunicaciones judiciales. EFECOMCOM