
La Delegada del Gobierno en Asturias, Adriana Lastra no ha dudado en calificar de "grave" la actitud del presidente del PP, Álvaro Queipo que este sábado la ha acusado de "desvergüenza" por denunciar una campaña de odio a cuenta de las obras del puente de Ribadesella.
Queipo, condenó este sábado los ataques que ha denunciado estar sufriendo Lastra, a raíz de la obra pero ha mostrado su rechazo al señalamiento al alcalde del concejo como origen de esos insultos o como motivador, algo que ha considerado "de una desvergüenza tan absoluta que no merece ni comentario" y ha tildado de "cortina de humo" las declaraciones de Lastra.
Lastra no ha tardado en replicar a Queipo. "Lo más grave es que el señor Queipo me acuse de 'desvergüenza' por denunciar una campaña de odio que está ahí, con nombres, con mensajes y con pruebas. Que se considere un atrevimiento alzar la voz frente a insultos, amenazas y deshumanización es, en sí mismo, profundamente sintomático de lo que hay detrás", afirmó la delegada.
Además Lastra denunció la falta de acción del alcalde, quien, a pesar de conocer los mensajes de odio recibidos, no ha condenado públicamente dicha campaña. "Su silencio no es neutralidad: es complicidad", dijo.
ACLARAR LOS PLAZOS
Álvaro Queipo dijo este sábado, por error según incidó más tarde el PP, que el tráfico en el puente estaría cortado durante "quince meses". Lastra quiso dejar claro de nuevo los plazos.
"Frente a esa manipulación, yo prefiero recordar los hechos: desde la primera reunión que mantuve con el alcalde el pasado 17 de diciembre, he estado plenamente implicada en esta actuación. Hemos buscado alternativas, incluso con el Ejército de Tierra, y hemos preparado un plan de movilidad que el Ayuntamiento conoce desde hace días y al que, a día de hoy, aún no ha respondido", subrayó Lastra,
Insistió en que "es importante señalar que tanto el alcalde como los grupos municipales fueron informados personalmente por el director de la obra sobre el estado actual del puente, así como de la complejidad del proceso de cambio del tablero".
"Se les explicó que, debido a las características del trabajo, resulta imposible mantener la carretera abierta mientras se lleva a cabo dicho cambio, lo que hace necesario el cierre temporal de la vía durante las 15 semanas de ejecución", manifestó.
Además, la delegada destacó que, durante las 15 semanas en las que se llevará a cabo la obra, el paso peatonal se mantendrá completamente abierto, garantizando la accesibilidad para los ciudadanos. La obra cuenta con un presupuesto de más de 7 millones de euros y es clave para la seguridad y ampliación de la estructura del puente.
La delegada del Gobierno reafirmó su compromiso con la ejecución de la obra, destacando su necesidad para asegurar la seguridad y la eficiencia de la infraestructura en la zona.