En un escenario de incertidumbre impera la prudencia y la rebaja de exposición a riesgos

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Madrid, 7 abr (EFECOM).- La puesta en marcha de la política arancelaria del presidente de EE.UU., Donald Trump, ha venido a cambiar el orden mundial provocando un auténtico terremoto comercial y bursátil, en el que la incertidumbre se ha apoderado del mercado y ahora lo que toca es mantener la prudencia y evitar los riegos.

Según coinciden todas las firmas de análisis, ante un contexto que se ha deteriorado brusca y rápidamente, la prioridad de los inversores debe ser "proteger" y apartar la idea de un rebote rápido de las bolsas tras el hundimiento, pensando en la posibilidad de que las medidas arancelarias se relajen.

En este sentido, los analistas de Bankinter consideran que la clave en este momento para los inversores es reducir riesgos, ya que el daño de esta guerra arancelaria será semiestructural o estructural, y, por tanto, imposible de revertir a corto plazo.

En una guerra comercial no hay ganadores, y por ello desde Bankinter se cree que el mercado se quedara tocado durante un tiempo y ahora hay que posicionarse de manera defensiva y sin asumir riesgos innecesarios, ya que una intensificación de la guerra comercial plantea un escenario con menos crecimiento y más inflación.

En este mismo sentido, el analista de eToro Javier Molina advierte de que, con mercados sin suelo claro y el crédito empezando a tensarse, ahora no se gana por comprar en mínimos, sino por saber esperar, ya que no se trata de una corrección cualquiera, porque lo que empezó como un ajuste técnico ha mutado en una crisis de confianza.

Trump ha subido los aranceles de forma abrupta, desordenada y sin plan, y el mercado lo ha recibido como lo que es, un error de magnitud histórica, ha subrayado Molina.

El analista de XTB Manuel Pinto ha apuntado que, aunque no sea el escenario base que baraje una recesión en EE.UU. que arrastre a gran parte de la economía mundial, lo cierto es que cada vez parece más realista

Según Pinto, los aranceles de Trump son una estrategia, junto al secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, con el objetivo de reducir la rentabilidad de los bonos, ya que los rendimientos de los bonos estadounidenses fijan el precio de las nuevas hipotecas y controlan la financiación del gobierno.

En referencia a los bancos españoles, Pinto ha destacado que el sector descontaba unas expectativas muy optimistas para este 2025, pero los aranceles de Trump han supuesto un importante choque de realidad.

Y los bancos, añade, debido a su comportamiento cíclico y su dependencia de la actividad económica, sufren ante la expectativa de una menor actividad, de menores solicitudes de crédito o consumo o de la parálisis de las compañías ante la incertidumbre global

Desde Renta 4 también se considera que los aranceles no son un fin en si mismo para la política de Trump, sino una forma de recuperar la industria y empleo manufacturero en el país, para lo que además necesitan unos precios de energía asequibles y un dólar débil.

El director de Mercados de Capitales de Allianz Global Hans-Jörg Naumer, alerta de que la incertidumbre generada por los aranceles a las importaciones está acelerando la desglobalización.

Esto, considera, podría traducirse en un menor crecimiento económico mundial, a lo que se suma que los aranceles funcionan como un impuesto al consumo, alimentando la inflación y perjudicando el poder adquisitivo de los estadounidenses, lo que se refleja en una marcada caída de la confianza del consumidor, .

En las actuales circunstancias, el peligro de recesión atemoriza al mercado.

En este sentido, la firma especializada en pagos internacionales e intercambio de divisas Ebury cree que el tambaleante estado de la economía de la UE, con un arancel del 20 %, podría ser suficiente para llevarla a una recesión, a pesar de los estímulos fiscales de Alemania, que puede que no se noten hasta 2026. EFECOM