España destaca que las elecciones en Bielorrusia han carecido de "estándares democráticos"

El Gobierno español condena las elecciones en Bielorrusia por la falta de "mínimos estándares democráticos" y exige el respeto a los derechos humanos y la celebración de comicios libres y justos

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Madrid, 26 ene (EFE).- El Gobierno español ha denunciado que las elecciones en Bielorrusia, que ganará el actual presidente, Alexandr Lukashenko, han carecido de "mínimos estándares democráticos" y se han caracterizado por "graves restricciones a la participación política" y al trabajo de los medios de comunicación.

Mediante un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores se posiciona respecto de un proceso electoral cuyo ganador será otra vez Lukashenko, según los sondeos a pie de urna, que le otorgan más del 87 % de los votos.

Tras seguir con "atención" el desarrollo de las elecciones, España "constata que dicho proceso no ha sido conforme a los más mínimos estándares democráticos, con graves restricciones a la participación política y a la labor de medios de comunicación independientes".

El ministerio que dirige José Manuel Albares expresa, por tanto, su apoyo a las "aspiraciones democráticas del pueblo bielorruso y de la oposición democrática", y por ello, exige "la celebración de unas elecciones libres, inclusivas y con todas las garantías".

También "el fin de la represión y el respeto pleno de los derechos humanos y libertades fundamentales, incluyendo los de opinión, manifestación y participación política, así como la liberación inmediata e incondicional de todos los presos políticos".

Un séptimo mandato tendrá Lukashenko en Bielorrusia tras las elecciones celebradas este domingo, tal y como anticipan los sondeos.

Hasta 2030 seguirá gobernando el mandatario, a quien la oposición en el exilio no reconoce como legítimo presidente.

Lukashenko, de 70 años, era ya el gobernante europeo con más tiempo en el poder, desde 1994 exactamente. Tras votar en Minsk, la capital, este domingo, aseguró que le da igual que los países occidentales no reconozcan las elecciones. EFE