El legado de Berhanyer, Pertegaz o Del Pozo, entre los vaivenes de directores creativos

La evolución de las casas de moda españolas, desde Elio Berhanyer hasta Balenciaga, destaca los retos de sus herederos y los cambios en la dirección creativa que marcan su legado

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Carmen Martín/Begoña de Fuente

Madrid, 22 ene (EFE).- "Las marcas nunca mueren, muere el diseñador", decía el creador Elio Berhanyer, cuyo legado pasó tras su fallecimiento a manos de sus herederos empeñados en preservar el brillo de la casa, pero que al igual que ocurrió con otros creadores españoles, como Manuel Pertegaz o Jesús del Pozo, camina entre las idas y venidas de directores creativos.

Convencido de su talento y sensibilidad con los tejidos y diseños, Elio Bernhanyer (1929-2019) abrió su propia casa de costura en 1960. De sus manos salieron vestidos para artistas como Ava Gardner, Lola Flores o Cyd Charisse, también para aristócratas como la duquesa de Alba o la condesa de Romanones, e incluso para la reina Sofía.

Después de seis décadas, sufrió la recesión económica de 2008 y se vio obligado a cerrar su firma por falta de liquidez. Hasta su último desfile de 2010 en la pasarela de Madrid, Berhanyer había cosido más de cien colecciones, 23.000 creaciones de alta costura y había vestido a más de 600 novias.

El maestro falleció sin haber logrado el propósito de relanzar su firma. El deseo quedó en manos de sus herederos quienes se pusieron manos a la obra para emprender un nuevo vuelo de la mano de Sergio de Lázaro.

Pero esta semana, su legado, ha sufrido un revés después de que sus herederos, apartaran el pasado mes de diciembre a De Lázaro de la dirección creativa por "una total falta de confianza", según ha explicado este miércoles a EFE el representante de la empresa Berhanyer, Andrés Romero.

  Conocido por un estilo que resalta la figura femenina con líneas suaves y sofisticadas, Manuel Pertegaz (1918-2014) se convirtió en el primer español en llevar sus trajes a la Quinta Avenida de Nueva York y confeccionó del vestido de novia de la reina Letizia, en 2004.

Diez años después de se muerte, su legado está en manos de su ayudante y hombre de confianza, Ángel Tribaldos, empeñado en preservar el brillo de esta casa de moda que vistió a mujeres como Ava Gardner Jacqueline Kennedy o Audrey Hepburn.

Con 90 años, presentó su primera colección de joyas y como broche a su carrera recibió en 2009 el primer Premio Nacional de Diseño y Moda de manos de Felipe VI y Letizia, entonces Príncipes de Asturias.

Falleció en Barcelona a los 96 años. Y no fue hasta 2017 cuando la compañía gallega Jealfer se hizo con la licencia de moda femenina de la marca y emprendió su relanzamiento. Para ello, la compañía fichó en 2019, como director creativo, al diseñador Jorge Vázquez, quien llevó a la firma a la pasarela de Madrid.

Ahora, la compañía Jealfer, ya sin Jorge Vázquez, crea los diseños de mujer mientras se mantenga el contrato.

¿Qué pensaría Manuel Pertegaz de su legado? "Creo que con unas cosas estaría contento y con otras no tanto", reconoció en una entrevista a EFE Ángel Tribaldos, quien, por otro lado, considera que "ni Pertegaz ni ningún diseñador que volviera (resucitara) estaría contento con el camino o rumbo que toma su legado".

El volumen de las prendas, los colores y las texturas fueron las señas de identidad de Jesús del Pozo (1946-2011), primer diseñador de moda que recibió la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes en 1998.

    Un año después de su fallecimiento, el Grupo Perfumes y Diseño adquirió la firma que pasó a llamarse Delpozo bajo la dirección creativa de Josep Font quien desarrolló una clara estrategia de internacionalización y se convirtió en diseñador de cabecera de Melania Trump, además de vestir a la reina Letizia.

Sin embargo, y pese al éxito cosechado, Font abandonó el timón en 2018, siendo sustituido por el alemán Lutz Huelle, que apostó por hacer la firma mas accesible al gran público. Poco duró esta aventura. Carente de inversión, en septiembre del 2019, Delpozo cerró su división de moda y en el verano de 2021, se anunció su cierre definitivo.

    Coincidiendo con el 50 aniversario de la firma, desde 2024 Joaquín Trías y Enrique Mellado, nuevos directores creativos de la firma, buscan reconstruir la marca desde cero dándole un nuevo giro.

 Angel Schelesser es la firma española que fundó Angel Fernández Ovejero (Santander, 1957) en 1983. Licenciado en Derecho, empezó en el mundo de la moda junto al diseñador español Juan Rufete. Durante más de 30 años sus creaciones estuvieron dotadas de un estilo minimalista, elegante y atemporal que le reportó el reconocimiento como una de las figuras emblemáticas de la moda española.

   En 2016 Fernández Ovejero vendió el 75% de su marca al empresario español Óscar Areces. Cuatro meses después, sin embargo, el fundador dejó de ser director creativo de la firma tras ser supuestamente relegado, lo que derivó en un conflicto ante los tribunales que se prolongó durante años.

    Alejado desde entonces de las labores creativas, Carolina Menéndez, primero, y los diseñadores Daniel Rabaneda, y Juan Carlos Mesa después, lideraron la visión creativa de la que la marca.

    En 2022 Fernández Ovejero rompió definitivamente con Schlesser, coincidiendo con un expediente de regulación de empleo (ERE), el cierre de la tienda en Madrid y una reducción de capital para compensar pérdidas.

   La circunstancia no impidió sin embargo que, precisamente ese año, su legado fuera reconocido con el Premio Nacional de Moda.

    Hoy en día, el creador vive alejado de la moda y centrado en el diseño, el arte y el interiorismo, mientras el nuevo director creativo de la firma desde septiembre de 2022, es el diseñador Alfonso Pérez.

     La compañía no cuenta actualmente con ningún establecimiento propio, tan sólo un 'outlet' en el distrito de Chamberí, en Madrid. Sí mantiene activa su plataforma de ecommerce con la que distribuye ropa, bolsos y perfumes.

  La casa de moda Balenciaga fue fundada en 1917 por el diseñador Cristóbal Balenciaga (1895-1972) en San Sebastián, España, y con sede actual en París. Su creador, conocido como 'El Maestro' de la alta costura, fue uno de los diseñadores más innovadores e influyentes del siglo pasado.

    Balenciaga se retiró en 1968, y tras su fallecimiento, en 1972, la marca sólo se mantuvo activa en el mercado nipón hasta que en 1987 Michael Goma la recuperó y lanzó una colección de prêt-à-porter que no obtuvo el resultado deseado.

     Tras pasar por algunas manos, el grupo Gucci compró la firma en 2001. El holding ha pasado por varias reestructuraciones y cambios de nombre, Kering desde 2013, que incluye firmas como Yves Saint Laurent, Gucci o Bottega Veneta.

Entre 2012 y 2015, Alexarder Wang estuvo al frente de la dirección creativo de la firma. Tras su salida, el georgiano Demna Gvasalia revolucionó la firma por completo y supuso su regreso al mundo de la alta costura.

      Durante estos años, Gvasalia ha logrado no solo disparar los beneficios y abrir casi un centenar de nuevas tiendas, además de recuperar una deseada popularidad, no exenta de polémica y golpes de efecto, que se disparó cuando presentó unas zapatillas destruidas que valían casi dos mil dólares pero que se viralizaron en las redes sociales.

   En últimas fechas, celebridades como Rihanna o Kim Kardashian han lucido las creaciones de este diseñador, uno de los más transgresores y provocadores de la industria del lujo.

A pesar de las idas y venidas de los directores creativos, el legado de estos grandes diseñadores sigue vivo y su trabajo se valora y recuerda en exposiciones. EFE

(Recursos de archivo en www.lafototeca.com cód 3451123 y otros)