Pamplona, 22 ene (EFE).- Osasuna llevó a cabo este miércoles el penúltimo entrenamiento antes de viajar a Las Palmas con la incógnita del estado de Bryan Zaragoza, quien ya acumula varios días con el grupo que dejan abierta su presencia en la lista de convocados de mañana.
Como es habitual en las últimas semanas, Vicente Moreno cerró las puertas de Tajonar para preparar la cita ante el cuadro canario, que tendrá lugar el viernes y corresponde a la vigésima primera jornada de LaLiga.
En el choque celebrado en la primera vuelta, en septiembre pasado, los navarros vencieron por 2-1 en casa.
Con ganas de dejar atrás la falta de victorias en el torneo liguero, los rojillos afrontan la cita con todos sus pupilos disponibles, salvo la única duda de Bryan. El malagueño toca balón al mismo ritmo que sus compañeros desde hace un tiempo, ganando en competitividad con la misión de volver lo antes posible.
El del viernes será el último partido de enero, fecha para la que no estaba previsto su regreso. De no darse ahí, el doble enfrentamiento ante la Real Sociedad de Liga y Copa los días 2 y 6 sería el límite para verle correr de nuevo por la banda izquierda.
Sin Nacho Vidal entrenándose tras confirmar su salida hacia Oviedo, Osasuna ha recuperado fuerzas esta semana tras el 1-1 ante el Rayo Vallecano del domingo pasado. EFE
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