Vitoria, 18 ene (EFE).- El Baskonia examinará su reciente transformación este domingo en su regreso a la Liga Endesa ante el Río Breogán, que también comienza a levantar el vuelo, pero que llega con muchos problemas físicos a Vitoria.
El equipo de Pablo Laso cuenta con mínimas opciones para colarse en la Copa. La combinación casi imposible pasa por operaciones matemáticas 'marcianas'.
Por un lado debe ganar al Río Breogán y que pierdan Barça y Casademont Zaragoza. Además tiene que remontarles el ‘average’, que ahora mismo es favorable en 74 puntos para los blaugrana y en 53 para los maños. También deberían acabar por delante del UCAM Murcia, o bien perdiendo estos o no superándole en el 'average'.
Así, los vitorianos se centrarán en sumar partidos para recuperar posiciones de cara al playoff final.
De momento, la escuadra baskonista pondrá fin a una primera vuelta con más sombras que luces pero en una semana que invita a la esperanza tras su puesta en escena en la Euroliga ante Olympiacos y Panathinaikos.
La defensa de los vascos y el ritmo ofensivo fue clave para demostrar que puede haber Baskonia de aquí al final.
Con Tim Luwawu-Cabarrot y Chima Moneke como estiletes, parece que Trent Forrest y Kamar Baldwin han entendido, que algo más de velocidad puede ayudar a su equipo, que no contará con Tadas Sedekerskis, pero recupera a Markus Howard.
Por el lado lucense, no podrán estar Charlie Moore y Aleksandar Aranitovic. Además tienen las dudas de Jordan Sakho, Dragan Apic y Dominik Mavra.
Por otra parte, el exbaskonista Arturs Kurucs podría debutar tras su reciente llegada, mientras que Adam Somogyi es baja definitiva tras acordar su salida con el club. EFE
jd/jn/nam
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