El PSOE extremeño trata de remontar la debacle que prevén las encuestas con un Sánchez volcado con un candidato que no ilusiona

Los socialistas extremeños pueden sufrir una caída inédita en la Asamblea Extremeña, mientras el PP se acerca a la mayoría absoluta. El voto femenino queda muy desgastado tras el reguero de denuncias por acoso sexual en el partido que se autodefine como “feminista”

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El presidente del Gobierno, Pedro
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el candidato socialista a la Junta, Miguel Ángel Gallardo, en un mitin en Extremadura. (Europa Press)

“Ante el dilema que tenemos, dos papeletas que representan la involución de Extremadura, la del PP y la de Vox, y una papeleta que representa el progreso de Extremadura, que es la del Partido Socialista, todos a votar a Miguel Ángel Gallardo como próximo presidente de la Junta de Extremadura”. Estas fueron las palabras de Pedro Sánchez ante los suyos en un mitin electoral celebrado este domingo en Extremadura, en su primera aparición pública después de la cascada de investigaciones por corrupción y denuncias de acoso sexual que el jueves y el viernes marcaron otra semana negra para el PSOE.

Pese a todo, Ferraz se vuelca con su candidato en Extremadura para tratar de remontar una situación que no es nada alentadora. O al menos eso dicen todas las encuestas. La elaborada por el CIS vaticina que el PSOE caería a un rango de entre 19 y 22 escaños, notablemente alejado de los 28 actuales. Otro sondeo, esta de SigmaDos para El Mundo, prevé que el PP de María Guardiola podría sacar hasta nueve escaños de diferencia, mientras que según el de EM Analytics, la distancia podría fijarse en los seis. El último de los estudios, realizado por GESOP para El Periódico Extremadura, pronostica que Gallardo podría perder hasta nueve escaños en el peor de los escenarios.

La decisión de María Guardiola de pulsar el botón del adelanto electoral pilló con el pie cambiado a los socialistas, que sin tiempo para decidir tuvieron que decantarse por su secretario general extremeño. Una opción arriesgada, pues está procesado en el juicio que investiga la contratación irregular del hermano del presidente del Gobierno en la Diputación de Badajoz. Según una encuesta publicada para ABC, el 76% de los encuestados consideran que fue una mala idea ponerle al frente.

Los socialistas tratan de remontar también el voto femenino. Porque el partido que se autodenomina “feminista” está viendo cómo se desangra ante un reguero de denuncias por acoso sexual que afectan a varias delegaciones socialistas y que han llevado a ponerle el título del ‘Me Too’ del PSOE. La decepción del voto femenino ya comenzó a raíz del ‘caso Koldo’, que sacó a la luz los audios entre el exministro Ábalos y su exasesor Koldo García ‘repartiéndose’ prostitutas para pasar un fin de semana.

El candidato socialista Miguel Ángel
El candidato socialista Miguel Ángel Gallardo.

Cuando aparece un nuevo escándalo de esta índole, la estrategia de Sánchez es repetir que los socialistas fueron “los primeros en aplicar, con todas las consecuencias, el protocolo de acoso y de abuso en nuestro partido” y que su Gobierno “aprobó una ley que hacía obligatorio a todos los partidos políticos el incorporar y desarrollar protocolos de lucha contra el abuso y el acoso a las mujeres y actuamos en consecuencia”.

¿Reconoció “errores”, entonces? Sí, pero matizando después que es un “problema estructural y que “todos los derechos y todas las libertades de las mujeres han venido de la mano de las mujeres y del Partido Socialista Obrero Español”.

El dirigente socialista Francisco Salazar, que iba a ser nombrado por el Comité Federal del PSOE como adjunto a la secretaría de Organización, ha pedido ser apartado de sus funciones tras las informaciones que le acusan de tener comportamientos inadecuados contra mujeres que trabajaban en su equipo. (Fuente: PSOE)

Unidas por Extremadura saca rédito del desgaste del PSOE

La única esperanza de los socialistas, y en parte motivo de las críticas por su estrategia, es esperar a que Vox fagocite votos a los populares. En parte, esto se está produciendo, ya que los sondeos vaticinan que los de Abascal, con Óscar Fernández a la cabeza, duplicaría su resultado en el 21D.

Por el contrario, la izquierda de Podemos también espera beneficiarse de la sangría de votos socialistas. En una entrevista con Infobae España, la candidata Irene de Miguel afirmaba que su coalición ha sido la verdadera oposición “al gobierno de las derechas” en la Asamblea de Extremadura, “porque el Partido Socialista ha estado demasiado centrado en lo suyo”.