La Justicia concede la nacionalidad española por origen sefardí a una mexicana que demostró su descendencia con una carta firmada por un doctor en Historia colonial

Certificó su membresía y colaboración en la comunidad judía, participó en el Instituto Cervantes de Albuquerque y superó las pruebas oficiales de idioma y conocimiento constitucional requeridas

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Imagen de archivo de una
Imagen de archivo de una bandera española en Madrid. (Pexels)

La Audiencia Provincial de Madrid ha reconocido el derecho de Aida (nombre ficticio), ciudadana estadounidense residente en Albuquerque, Nuevo México, a obtener la nacionalidad española por su condición de sefardí originaria de España. La resolución judicial considera probado que Aida desciende, por línea materna, de judíos sefardíes, circunstancia respaldada por certificados expedidos por la Federación Judía de Nuevo México, informes genealógicos y una abundante documentación complementaria.

La sentencia subraya que la demandante ha aportado acreditaciones equivalentes a las que permitieron a su hermana, Lucía, obtener previamente la nacionalidad española tras una sentencia favorable del Tribunal Supremo. En consecuencia, la Audiencia Provincial establece que se han acreditado tanto el origen sefardí como la especial vinculación de la solicitante con España, lo que obliga a concederle la nacionalidad.

La resolución de la Audiencia de Madrid desestima los argumentos de la Dirección General de Seguridad Jurídica y Fe Pública y del Ministerio Fiscal, declarando suficiente la documentación presentada por Aida para demostrar su condición de sefardí. El tribunal incide en que, conforme a la doctrina del Tribunal Supremo, no puede exigirse mayor carga probatoria que la prevista en la Ley 12/2015, y que la certificación expedida por la Federación Judía de Nuevo México, apoyada en informes genealógicos, dictámenes de expertos y documentación notarial, cumple con todos los requisitos legales.

Además del criterio de descendencia, la sentencia otorga especial relevancia a la documentación que acredita la especial vinculación de Aida con España. Entre la documentación valorada se encuentran certificados que demuestran su membresía y colaboración en la comunidad judía, su participación educativa en el Instituto Cervantes de Albuquerque y la superación de las pruebas oficiales de idioma y conocimiento constitucional requeridas. También acreditó sus ocho antepasados judíos con una declaración jurada firmada por un doctor en Historia mexicana colonial por la Universidad de Tulane legalizada ante notario.

Un primer tribunal aceptó la nacionalidad de su hermana, pero no de ella

El reconocimiento judicial a Aida llega tras un recorrido de varios años. El 10 de junio de 2021 su solicitud fue denegada, a diferencia de la de su hermana Lucía, que logró la nacionalidad gracias a la sentencia del Tribunal Supremo 81/2025 tras acreditar ante los tribunales el mismo linaje y circunstancias probatorias. La demanda de Aida fue rechazada inicialmente en enero de 2024 por el Juzgado de Primera Instancia nº 81 de Madrid, que consideró insuficiente la prueba genealógica y no entró a valorar la especial vinculación con España.

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Fue en apelación donde Aida aportó como elemento novedoso la sentencia favorable a su hermana, junto con todos los informes académicos, certificaciones y testimonios adicionales de expertos e instituciones españolas y estadounidenses. La Audiencia Provincial, a la luz de esas pruebas y del nuevo contexto jurisprudencial, decidió estimar el recurso, anular la denegación administrativa y reconocer los derechos de la demandante.

En esta instancia, el tribunal ha eximido a todas las partes del pago de costas tanto en primera como en segunda instancia, atendiendo a la complejidad normativa y a la existencia de sentencias recientes en la materia. Queda abierta la posibilidad de recurso de casación ante el Tribunal Supremo en el plazo legal, aunque la tendencia jurisprudencial apunta a la consolidación del criterio favorable a quienes acrediten un vínculo probado con la tradición sefardí y demuestren su relación efectiva con la sociedad española.