Page avisa a Pedro Sánchez de que puede llevarse un “disgusto” en las elecciones si se ofrece a seguir “arrodillado ante Puigdemont”

El barón socialista critica el rumbo del Gobierno con Junts, alerta de un “amplio malestar social” y reprocha que “pensar que de rodillas nos van a respetar más es un poco absurdo”

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El presidente de la Junta
El presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page (Juan Moreno - Europa Press)

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha intensificado este miércoles sus críticas a la estrategia del Gobierno central con el independentismo catalán, apenas un día después de que Pedro Sánchez admitiera “incumplimientos y retrasos” en los compromisos pactados con Junts en el marco de la legislatura. Page ha advertido de que el PSOE corre el riesgo de “llevarse un disgusto muy considerable” si decide presentarse ante los ciudadanos defendiendo la continuidad de una relación con los independentistas basada, según sus palabras, en “arrodillarse”.

Antes del acto institucional con motivo del aniversario de la Constitución celebrado en las Cortes regionales, el dirigente manchego respondió con contundencia a las preguntas de los periodistas sobre el deterioro del clima político entre el Ejecutivo y la formación de Carles Puigdemont. A su juicio, “Puigdemont y los suyos no han respetado al Gobierno cuando les hablamos de pie”, por lo que considera “absurdo” pensar que ofrecer más concesiones pueda traducirse en un mayor respeto institucional.

Malestar social por las cesiones

Page sostuvo que existe ya un “amplio malestar social” por el rumbo adoptado por el Ejecutivo hacia el independentismo y advirtió de un desgaste creciente incluso entre votantes progresistas. “Creo que está todo el mundo harto de la cesión y de los privilegios que se buscan desde el independentismo”, afirmó, recalcando que cada vez son más los ciudadanos que se preguntan “cuál es el coste que está teniendo aguantar a cualquier precio”.

El presidente regional manifestó sus dudas sobre la capacidad del Gobierno para cumplir lo pactado durante la investidura y en acuerdos posteriores. “Hay muchas cosas que no se han cumplido y otras que literalmente se ha hecho lo contrario”, lamentó, sin querer especular sobre un posible adelanto electoral. Recordó, no obstante, que la decisión sobre un eventual anticipo “le corresponde al presidente del Gobierno”.

Pedro Sánchez da la mano
Pedro Sánchez da la mano a Emiliano García-Page en la Conferencia de Presidentes. (Kike Rincón/Europa Press)

Uno de los puntos más sensibles es la reciente cesión a la Generalitat de la competencia para seleccionar a los interventores municipales, un movimiento que Page interpreta como una concesión injustificable dentro del marco constitucional. “Nosotros vamos a hacer todo lo posible para que no se ponga en el mercado el concepto de igualdad bajo ningún concepto”, defendió, subrayando que “la igualdad, y menos por un socialista, jamás se puede poner en el mercado de la transacción política”.

De cara a unas futuras elecciones generales, insistió en que sería un error estratégico que el PSOE acudiese a las urnas reivindicando la misma política de alianzas que ha permitido sostener la legislatura. “Si vamos presumiendo de habernos arrodillado ante Puigdemont y además se quiere ofrecer seguir así, me parece que nos estamos equivocando”, afirmó.

La crisis interna por los casos de corrupción

Page también se refirió a los casos de presunta corrupción y consumo de prostitución que salpican al entorno más próximo de Pedro Sánchez y que están teniendo un fuerte impacto dentro del partido. Sin citar directamente al presidente, lamentó que un grupo de dirigentes “primarios en su comportamiento” esté generando un daño profundo a la imagen del PSOE.

Mencionó explícitamente a Santos Cerdán, José Luis Ábalos y Koldo García, a quienes atribuyó actuaciones que provocan “vergüenza” dentro del socialismo. “Este pequeño grupo de primarios nos está haciendo un boquete muy considerable a todos los socialistas”, denunció, lamentando que este tipo de comportamientos contradigan de forma flagrante los valores que el partido dice defender.

El presidente manchego mostró especial preocupación por el efecto de estos escándalos en el electorado feminista, considerado históricamente uno de los grandes apoyos del PSOE. “Me imagino a miles y millones de mujeres que han confiado siempre en el PSOE como la gran fuerza que ha cambiado y que ha apoyado el feminismo. Me duele pensar que puedan creer que la mayoría somos así”, señaló.

En cuanto a la afirmación de Sánchez de que algunos de los implicados eran “grandes desconocidos” para él en lo personal, Page evitó entrar en polémicas directas, aunque subrayó la dificultad de separar lo personal y lo político en la vida pública. Aun así, dijo no haber pensado “nunca” que el presidente o su familia estuvieran vinculados a un entorno de “avaricia económica”.

Junts formaliza su ruptura con el Gobierno y anuncia que bloqueará leyes en trámite y futuras.

Sin ocultar el trasfondo de tensión que atraviesa al PSOE, Page volvió a marcar distancias con la dirección federal. Recordó que “ya se han hecho demasiadas cesiones” y que los privilegios reclamados por el independentismo “no han traído nada más que dolor a Cataluña y al conjunto de España”, insistiendo en que su postura no es nueva, pero sí más gráfica ante la situación actual.