Rescatan un serval de un domicilio particular de Alicante después de que la familia reconociese no poder cuidarlo con seguridad

La tenencia de este felino depredador como animal doméstico es viral en redes sociales, lo que fomenta su comercio pese a que en España es ilegal

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Rescatan a un serval de un domicilio particular en Alicante. (Guardia Civil y Coalición para el Listado Positivo)

La Coalición para el Listado Positivo, en colaboración con el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil, ha rescatado a un serval en un domicilio particular de la provincia de Alicante. Ha sido la propia familia cuidadora del felino, una hembra de cinco años y de nombre Tila, la que ha reportado su incapacidad de seguir manteniendo al animal, que actualmente se encuentra en el centro de rescate y rehabilitación AAP Primadomus, en Villena (Alicante).

El serval o gato serval (Leptailurus serval) es un depredador carnívoro y territorial que habita principalmente en países del África Subsahariana. Capacitado para moverse de forma ágil y saltar hasta tres metros de altura durante la caza, este felino salvaje no es adecuado para la crianza en entornos domésticos.

“Un gato serval no es un animal de compañía”, ha señalado Olga Martín, coordinadora de la Coalición para el Listado Positivo, conformado por la Asociación Nacional para la Defensa de los Animales (ANDA), la Fundación para el Asesoramiento y Acción en Defensa de los Animales (FAADA) y AAP Primadomus. “El hecho de que un animal exótico haya sido criado en cautividad no elimina su naturaleza salvaje, y por lo tanto conserva sus instintos naturales y sus necesidades comportamentales”.

La experta ha destacado el sufrimiento que estos depredadores cazadores sufren al ser criados en estos entornos. “La frustración y el malestar que les comporta la cautividad puede derivar en comportamientos más agresivos de lo normal, llegando en muchos casos a morder, arañar, destrozar objetos, atacar a otros animales o a las personas”.

Tila durante su rescate. El
Tila durante su rescate. El serval se encontraba en un domicilio particular de Alicante. (Coalición para el Listado Positivo)

El serval, viral en redes sociales como “animal doméstico”

Según ha explicado el centro AAP Primadomus a Infobae España, la familia adquirió el serval de un criador en Ucrania. Allí Tila disponía de un recinto con un amplio espacio al aire libre, pero, al llegar a España, el domicilio de la familia no contaba con acceso al exterior. “Tila creció rápidamente y con niños pequeños en casa y visitas frecuentes de amigos, la familia ya no se sentía segura”, explican desde el centro.

Así, conscientes de que la situación era inadecuada y de que el malestar del serval iba en aumento, contactaron con AAP Primadomus para buscarle un lugar adecuado al felino. “En las redes sociales solo ves los momentos bonitos y positivos de tener un serval como animal de compañía, pero la realidad es que a medida que va creciendo resulta muy difícil mantenerlo en casa, sobre todo teniendo niños pequeños o si recibes visitas y el animal se pone nervioso. Si hubiera sabido antes las dificultades que suponía su cuidado, sin duda no lo hubiera adquirido”, han declarado fuentes de la familia.

Y es que el serval es desde hace unos años un animal viral en las redes sociales. Son bastantes los usuarios que a través de TikTok o Instagram documentan cómo es tener a este felino en casa. Los comentarios de estos contenidos revelan el interés de muchas otras personas por conocer el precio para adquirir uno. Esta situación ha llevado a que actualmente sea uno de los cinco animales con mayor número de solicitudes de rescate tanto en España como en Europa.

Tila durante su traslado al
Tila durante su traslado al centro de rescate y rehabilitación AAP Primadomus. (Coalición para el Listado Positivo)

Los problemas para la cesión del serval al centro de rescate

Hasta la aprobación y publicación del Listado Positivo, que actualmente se encuentra en marcha, la Ley 7/2023 de Protección de los Derechos y el Bienestar de los Animales prohíbe la tenencia como animales de compañía de mamíferos silvestres que en estado adulto superen los 5 kilogramos. El serval puede llegar a los 18, por lo que se encuentra dentro de esta prohibición.

Cuando la familia de Tila quiso buscar un lugar más adecuado para el felino, se encontraron con un gran escollo: no contaban con los documentos de importación necesarios debido a la precipitada huida de Ucrania con la guerra. Desde AAP Primadomus explican a este periódico que “los intentos de legalizar al animal mediante la documentación CITES fueron infructuosos ya que esta no se pudo conseguir debido a la situación del país” ucraniano.

Es por este motivo por lo que fue necesaria la colaboración y la mediación del SEPRONA para que el centro de rescate y rehabilitación pudiese acoger al serval. Por su parte, según insisten desde AAP Primadomus, la familia “no solo se ha hecho responsable de las consecuencias que pueda traer la confiscación de Tila”, que por el momento se desconocen, “sino que, además, ha querido hacerse socia de AAP para contribuir en los costes del cuidado del serval”.

Tila durante la cuarentena en
Tila durante la cuarentena en el centro AAP Primadomus. (Coalición para el Listado Positivo)

La importancia del Listado Positivo

El rescate de Tila, que se ha realizado en el marco del proyecto Save Exotics - Stop Amor Tóxico —que cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por la Unión Europea - NextGenerationEU— no es el único realizado en España este mes. El pasado 5 de noviembre se dio a conocer que la Guardia Civil había incautado cinco ejemplares de serval, introducidos sin la autorización CITES ni control aduanero o sanitario, en una operación contra el narcotráfico en la isla de Gran Canaria.

Desde la Coalición para el Listado Positivo señalan la importancia de controlar de forma estricta el comercio de estas especies. En el caso del serval, aunque no se encuentra en peligro de extinción, sí está incluido en el Apéndice II de CITES, lo que significa que podría llegar a estar amenazado como consecuencia de este motivo. Por ello, además, las organizaciones señalan que el desarrollo del Listado Positivo, en el que se recogerían las especies susceptibles de tenencia y comercio como animales de compañía, es de vital importancia, pues evitaría “tanto el sufrimiento del animal como los riesgos para el medioambiente y las personas”.