Este es el truco infalible que mantendrá los ratones alejados de tu jardín

La sorprendente solución natural que ahuyenta a los ratones y protege el jardín

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Las ratas y ratones pueden
Las ratas y ratones pueden provocar daños en las plantas del jardín. (Adobe Stock)

La ida del buen tiempo y el descenso de las temperaturas hacen que los ratones busquen refugios en zonas donde el calor abunda y tienen una fuente de alimento. Aunque a menudo pasan desapercibidos, estos animales pueden provocar daños materiales considerables y suponer un riesgo para la salud humana. Los expertos advierten que la acumulación de excrementos de ratones y ratas puede propagar bacterias, contaminar alimentos y causar reacciones alérgicas en humanos. Además, cuando la materia fecal se seca, su inhalación puede transmitir enfermedades como el hantavirus, la salmonelosis y la fiebre por mordedura de ratón.

Estos animales, además de los riesgos sanitarios, son conocidos por destruir jardines, especialmente aquellos en los que se cultivan hortalizas de raíz como zanahorias y patatas. Suelen ser nocturnos y se esconden en lugares oscuros: bajo suelos, cobertizos, invernaderos o composteras, lo que dificulta su detección y eliminación. Según revistas de jardinería, existen señales claras de su presencia: manchas de grasa a lo largo de paredes o vallas, excrementos cilíndricos de 15 mm de largo y 5 mm de ancho, daños en madera o plástico cerca de contenedores de comida o compost, marcas de dientes en cultivos, nidos formados por montones de material blando y agujeros en el suelo de entre 6 y 9 cm de diámetro, que pueden ser entradas a galerías subterráneas.

Uno de los motivos más habituales por los que los ratones acceden a los jardines es la presencia de comida, especialmente semillas de los comederos para pájaros. Para prevenir infestaciones, se recomienda retirar temporalmente estos comederos o asegurarse de que estén bien cerrados y que la comida no caiga al suelo.

Las ratas se han convertido en un problema en muchas ciudades

Soluciones naturales: el poder del ajo

La presencia de plantas moribundas, arbustos marchitos o árboles jóvenes muertos puede indicar infestación de campañoles o ratas de jardín. Dentro de esta familia se encuentran el campañol común, el campañol de campo y el campañol de banco, especies difíciles de distinguir para quienes no tienen experiencia. Cuando los ratones de campo anidan en jardines o campos, su reproducción es rápida: entre marzo y octubre pueden tener de tres a cuatro camadas, con un promedio de cinco crías por camada, y un campo infestado puede albergar más de 500 campañoles por hectárea, dificultando el control.

El olor a ajo es especialmente desagradable para ratones y ratas, lo que lo convierte en un recurso útil para mantenerlos alejados del jardín. La experta en jardinería Juanita Schulze recomienda plantar dientes de ajo alrededor del jardín, ya que los roedores evitarán estas zonas. También sugiere un método adicional: picar el ajo, hervirlo en agua, colar el líquido y pulverizarlo en la base de las plantas o esparcir los dientes de ajo por los bordes del jardín.

El olor a ajo es
El olor a ajo es especialmente desagradable para ratones y ratas. (Pixabay)

Métodos sostenibles y preventivos

El uso de venenos o productos químicos está cada vez más restringido, especialmente en explotaciones agrícolas ecológicas. En muchos países europeos, la matanza de topos está prohibida, por lo que la única opción es ahuyentarlos mediante sonido, vibración, trampas sin veneno, o métodos caseros. Para los ratones de campo, se pueden utilizar trampas de resorte colocadas estratégicamente en primavera, cuando se inicia la actividad reproductiva.