Meghan Markle vuelve a la actuación después de ocho años: su nuevo proyecto en Hollywood junto a Lily Collins y Brie Larson

Meghan Markle vuelve a ser actriz. Tras ocho años centrada en su vida familiar con el príncipe Harry, sus proyectos empresariales y su serie de estilo de vida en Netflix, la esposa del príncipe Harry ha retomado la interpretación en Hollywood.

La duquesa de Sussex ha sido vista en un set de rodaje en Pasadena, Los Ángeles, donde participa en la comedia Close Personal Friends, su primer papel en ocho años. Lo hace, además, interpretándose a sí misma. La noticia supone un giro relevante en la trayectoria de la actriz, quien dejó Hollywood tras iniciar su relación con el príncipe Harry y su entrada en la familia real británica. El proyecto, producido por Amazon MGM Studios, cuenta con un reparto destacado y ha despertado una gran expectación tanto en la industria como entre los seguidores de la pareja.

En este proyecto, Meghan compartirá pantalla con Lily Collins, Brie Larson, Jack Quaid y Henry Golding. La trama se centra en dos parejas, una famosa y otra anónima, que entablan amistad durante una estancia en Santa Bárbara, un guiño a la vida real de Meghan y Harry, cuya residencia se encuentra en Montecito, cerca del lugar donde se desarrolla la historia.

La duquesa ha sido vista en el set de Pasadena, y fuentes de la producción han subrayado la importancia de este momento para ella. Tal como ha recogido People, un miembro del equipo ha señalado: “Este es un momento enorme para Meghan y significa volver a hacer lo que realmente le apasiona”. La misma fuente ha añadido que, aunque la exactriz ha recibido numerosas propuestas en los últimos años, “esta le ha parecido la adecuada”. Por su parte, Mirror ha incidido en que este regreso supone “una forma suave de volver a probar el ambiente de un rodaje y comprobar cómo se siente de nuevo en el set”.

El apoyo del príncipe Harry ha sido constante. Según ha recogido Daily Mail, el duque de Sussex “quiere que Meghan haga aquello que le aporte felicidad”, mostrando así su respaldo a la decisión de su esposa de retomar su carrera artística.

La retirada de Meghan Markle de la interpretación se produjo en 2017, cuando su relación con el príncipe Harry se hizo pública y su papel en la serie Suits comenzó a verse comprometido. La actriz dejó la exitosa ficción legal tras siete temporadas y más de 100 episodios, justo antes de su boda en mayo de 2018. En una entrevista concedida en aquel momento, Markle explicó: “No lo veo como renunciar a nada, simplemente lo veo como un cambio”, subrayando que se sentía orgullosa de su recorrido en la serie y que era el momento de iniciar una nueva etapa junto a Harry.

La transición a la vida como miembro de la familia real británica supuso un cambio radical en su carrera. Markle había manifestado en varias ocasiones que no contemplaba volver a actuar, aunque nunca cerró la puerta del todo. En una entrevista con Variety en 2022 fue tajante: “No, he terminado. Supongo que nunca digas nunca, pero mi intención es absolutamente no volver”. Sin embargo, la propia duquesa reconoció en un pódcast reciente que “a veces echaba de menos la interpretación”, lo que sugiere que la decisión de regresar ha madurado con el tiempo.

Antes de alcanzar la fama internacional, Meghan Markle tuvo que superar numerosos obstáculos en la industria audiovisual. La actriz comenzó su carrera con pequeños papeles en series como Fringe y The League, además de trabajar como modelo en el programa Deal or No Deal. Su gran oportunidad llegó con el personaje de Rachel Zane en Suits, donde permaneció durante siete años.

No obstante, el camino no fue sencillo. Markle ha relatado en varias ocasiones que recibía muchas audiciones, pero los directores la rechazaban con frecuencia, lo que minaba su autoestima. La falta de papeles relevantes y la dificultad para consolidarse en Hollywood marcaron sus primeros años, hasta que la serie legal le permitió dar el salto definitivo.

Tras su salida de la familia real en 2020, Meghan Markle y el príncipe Harry se instalaron en California, donde han construido una nueva vida centrada en la familia y en proyectos audiovisuales. La pareja reside en Montecito junto a sus hijos, el príncipe Archie y la princesa Lilibet, y ha apostado por mantener un equilibrio entre la privacidad y la proyección pública.

En el ámbito profesional, la duquesa ha explorado nuevas facetas como productora y presentadora. Junto a Harry, ha impulsado la productora Archewell Productions y ha firmado un acuerdo de varios años con Netflix, que incluye la serie documental Harry & Meghan y el programa de estilo de vida With Love, Meghan. Este último ha contado con la participación de celebridades como Chrissy Teigen y Mindy Kaling, y ha reforzado la imagen de Meghan como creadora de contenidos y anfitriona.