El rey Juan Carlos acusa a Letizia de distanciar a Felipe VI de su familia y revela la invitación que la reina nunca aceptó

En sus memorias, que han visto la luz este miércoles en Francia, el exmonarca carga contra la esposa de su hijo y asegura que le ha impedido tener relación con la princesa Leonor y la infanta Sofía

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La reina Letizia y el
La reina Letizia y el rey Juan Carlos, en una imagen de archivo. (Lalo Yasky/WireImage)

Las memorias del rey Juan Carlos han visto la luz este miércoles 5 de noviembre en Francia y siguen sucediéndose los titulares sobre el contenido de las mismas. En el libro Reconciliación, escrito por Laurence Debray, el emérito apunta a la reina Letizia como artífice del distanciamiento de Felipe VI con sus hermanas y hasta con amigos de la infancia, además de responsabilizar a la reina de la nula relación que él mismo ha tenido con la princesa Leonor y la infanta Sofía.

El exmonarca lamenta en sus memorias que nunca ha podido disfrutar de una relación cercana y normalizada con sus nietas. “Desafortunadamente, nunca he podido salir a solas en Madrid con mis dos nietas, Leonor y Sofía”, expresa Juan Carlos, que hace extensible su queja también a la reina Sofía, quien, según el emérito, tampoco ha tenido la oportunidad de recibir a las niñas a solas en Palma, como sí ha hecho con sus otros nietos.

El monarca atribuye esta situación a la voluntad expresa de la reina Letizia, sugiriendo que la actual consorte habría llegado a prohibir a sus hijas realizar actividades tanto públicas como privadas con los reyes eméritos. El emérito insiste en que este distanciamiento no se debe a sus problemas fiscales ni a su marcha a Abu Dabi, sino que se remonta a la llegada de Letizia a la familia real.

Juan Carlos expresa su tristeza por no haber podido compartir con Leonor y Sofía momentos cotidianos, como contarles historias, comer juntos en restaurantes, viajar o asistir a partidos, actividades que sí ha disfrutado con otros nietos. Además, subraya que la reina Sofía habría deseado transmitir a sus nietas la genealogía, la historia y los valores familiares, así como algún consejo “de una reina emérita con una trayectoria impecable a una futura reina”, pero tampoco ha tenido ocasión de hacerlo con la frecuencia que le habría gustado.

“Letizia nunca vino”

El distanciamiento familiar es otro de los ejes centrales de las memorias. En su relato, el exmonarca achaca a la reina Letizia la falta de cohesión en las relaciones familiares. El emérito relata que, desde la llegada de la actual reina, Felipe VI se ha alejado no solo de sus padres, sino también de sus hermanas y de sus amigos de la infancia. “No contribuyó a la cohesión de nuestras relaciones familiares”, asevera el exmonarca sobre la llegada de su nuera a la familia.

El rey emérito asegura que, en numerosas ocasiones, ha invitado a Letizia a visitarle en su despacho, reiterándole que “la puerta de mi despacho estará siempre abierta para ti, ven cuando quieras”, pero, según ha narrado, la reina nunca aceptó la invitación. “Nunca vino”, expone. A pesar de estas diferencias, Juan Carlos insiste en que siempre ha intentado que las discrepancias personales no trascendieran en los actos oficiales, con el objetivo de proteger la imagen del matrimonio de Felipe VI y Letizia, al considerar que “el éxito de la pareja principesca era una garantía para el futuro de la Corona”.

En este contexto, el emérito también dirige críticas a Felipe VI, especialmente por la decisión de relegar a la infanta Cristina tras el caso Nóos. Juan Carlos considera que su hijo retiró los derechos dinásticos a su hermana en un momento especialmente delicado, justo cuando cumplía 50 años, y cuestiona la oportunidad de esa medida.

“Los medios hostigaron a mi hija y a su marido, filtraciones judiciales sobre su vida privada fueron publicadas. Fueron difamados y nunca disfrutaron de la presunción de inocencia, todo lo contrario”, dice sobre la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin. Además, confiesa que se arrepiente de haber impedido a su hija asistir a su ceremonia de abdicación: “Ahora que estoy recluido en Abu Dabi me pregunto si hice lo correcto. Hemos sabido dejar atrás nuestras diferencias y nuestras penas para preservar nuestra relación de padre a hija”, sentencia.