‘La Era de la Revelación’: el nº3 de Trump Marco Rubio y una treintena de altos cargos estadounidenses aseguran en un documental que los OVNIs existen y llevan aquí mucho tiempo

Figuras clave del gobierno, el ejército y la inteligencia de Estados Unidos participan en un documental de Prime Video en el que afirman abiertamente la existencia de una “guerra secreta” internacional por tecnología alienígena

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‘La Era de la Revelación’:
‘La Era de la Revelación’: el nº3 de Trump Marco Rubio y una treintena de altos cargos estadounidenses aseguran en un documental que los OVNIs existen y llevan aquí mucho tiempo (Montaje Infobae)

“Creo que solo se va a hacer más y más y más raro, y al final va a ser tan raro que la gente va a tener que hablar de lo raro que es. Llegará un momento en que la gente tendrá que preguntarse: ‘¿Qué diablos está pasando?’“, decía sobre el futuro el filósofo y escritor estadounidense Terence McKenna antes del cambio de milenio en una de sus últimas entrevistas, un par de años antes de su muerte por cáncer cerebral.

No le faltaba razón. Mucho ha cambiado desde entonces: sobre todo por el internet y las redes sociales, pero también por los labubus y pollofres, por los videos hechos con IA de Mao y Mussolini dándose besos cargados de pasión o, más recientemente, por la participación del Secretario de Estado de los EE.UU., Marco Rubio - y otros 33 altos cargos del Gobierno, el ejército y los servicios de inteligencia del país - en un documental con estreno en noviembre en el que aseguran que los OVNIs existen, que no son humanos, y que llevan mucho tiempo aquí.

“He visto, con mis propios ojos, naves no humanas y criaturas no humanas”

La semana pasada, se confirmaba la fecha de salida de The Age of Disclosure: el 21 de noviembre se estrenará en varios cines seleccionados de Nueva York, Los Ángeles, y Washington; y al mismo tiempo será lanzado en Prime Video en muchos países, entre ellos, por suerte para escépticos, creyentes y todo aquel que simplemente quiera ser testigo de tal espectáculo, en España.

“El pueblo americano está preparado para recibir la verdad” es la frase con la que arranca el tráiler. Todo un cliché, como de película, pero - según dicen - es “la verdad”. “La humanidad no es la única inteligencia del Universo”, “Absolutamente no estamos solos”, “Existe la inteligencia no humana”, “los Fenómenos Aéreos No Identificados son reales, están aquí, y no son humanos” y alguna otra variación de las mismas declaraciones se suceden entonces en ráfaga. “Son cosas de otro mundo” parece ser el consenso.

Si uno escuchase estas palabras en un foro cualquiera, la primera reacción sería atribuirlo a un brote o un delirio. Pero no salen de cualquier boca. Los mismos sujetos se presentan con sus credenciales a continuación y quedan un poco lejos de lo que uno podría asumir de alguien que mira al cielo y grita “¡Ovnis!“: “Pasé 25 años como oficial superior en la CIA”, “trabajé en un programa de Fenómenos Aéreos No Identificados altamente clasificado”, “28 años como astrofísico”, “fui el cuarto director de Inteligencia Nacional”, “Director de Seguridad de Aviación en el Consejo Nacional de Seguridad”, “almirante de una estrella tras 32 años de servicio”. Kristen Gillibrand, senadora demócrata; Mike Rounds, Senador republicano; Jay Stratton, exdirector de la Fuerza Operativa del Gobierno sobre Fenómenos Aéreos No Identificados; Andre Carson y Tim Burchett, miembros de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos; Jim Clapper, exdirector de Inteligencia Nacional. Por nombrar algunos rostros que, ante las cámaras de Dan Farah, productor del documental - y de la película Ready Player One - han realizado tales afirmaciones extraordinarias.

Pero la participación, quizás, más destacable, es la del secretario de Estado Marco Rubio, que declara, ante la cámara: “Hemos tenido varios casos en los que algo operaba en el espacio aéreo de centros nucleares restringidos, y no era nuestro”. "Incluso presidentes han estado operando solo con información estrictamente necesaria" - queriendo decir que la compartimentalización de la inteligencia referida a este fenómeno es tal que incluso los más altos mandatarios electos, al ser de quita y pon con sus términos de cuatro años, no tienen acceso a ella - “pero eso se empezó a descontrolar”, asegura.

El Pentágono desclasificó los videos de tres avistamientos de ovnis

El secreto mejor guardado de la historia - o una mentira preocupante

Las declaraciones que componen este tráiler prometen que la información al respecto “podría cambiar la trayectoria de una especie” y que “es el mayor descubrimiento de la historia humana”. “Las personas que han decidido revelar esto... siento que tienen su propia vida en las manos”, valora una fuente. “Algunas personas aseguran que hablar sobre estas cosas les costaría la vida”, dice otra. Dramático, cierto es, pero surgen dudas: si el secreto es tan profundo como para justificar una muerte y la maquinaria que lo mantiene oculto tan poderosa como juran, ¿Cómo es posible que se le haya escapado que Amazon estaba grabando un documental al respecto con tanta autoridad en el elenco?

Como no podía faltar, llega también Louis Elizondo. ‘Lue’ lleva años en el centro mediático de este fenómeno como, según jura y perjura, ex alto funcionario de Inteligencia y Agente Especial de Contrainteligencia que fue reclutado para un supuesto programa altamente clasificado destinado a investigar las incursiones de OVNIs - que ahora no llaman Objetos Voladores, sino Fenómenos Aéreos - en instalaciones militares. Lue asegura que fue director de un programa del Pentágono llamado AATIP (por las siglas en inglés de Programa Avanzado de Identificación de Amenazas Aeroespaciales). Es cierto, confirma el Pentágono, que Elizondo formaba parte del departamento de Defensa, de Inteligencia y Contrainteligencia. Lo que niegan, sin embargo, es la existencia de dicho programa y, por tanto, también la participación del autoproclamado filtrador de información super-secreta.

Lue asegura que “descubrimos que el Gobierno de los Estados Unidos estaba involucrado en una larga guerra secreta con otras naciones para recuperar y realizar ingeniería inversa de vehículos no fabricados por humanos”. Declaraciones extraordinarias, pero aun así se queda corto si se compara su afirmación con la de otra fuente más, que asegura que, habiendo pasado “16 años trabajando para el Gobierno de los Estados Unidos como alto oficial de inteligencia en torno a los fenómenos aéreos no identificados”, ha “visto”, con sus “propios ojos, naves no humanas y criaturas no humanas”. La competición internacional secreta, sugiere, es de vital importancia: “El primer país que descifre esta tecnología será el líder en los años venideros. Esto es como el Proyecto Manhattan. Esto es la bomba nuclear con esteroides”.

Independientemente de lo que uno crea o deje de creer, no deja de ser preocupante. Si fuese verdad eso de que los cielos terrestres están plagados de OVNIs, preocuparía por motivos obvios. Pero si es todo falso, participando como hacen tales autoridades estadounidenses, cabe preguntarse: ¿Qué se espera conseguir con la mentira?