Sarah Ferguson habría visitado junto a sus hijas a Epstein tras su primera salida de prisión: “Fue la primera en celebrar mi liberación”

El diario ‘Daily Mail’ ha revelado unos correos electrónicos en los que el pedófilo afirma a su abogado que la exmujer del príncipe Andrés habría acudido junto a sus dos hijas a celebrar su salida de prisión

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Sarah Ferguson, el príncipe Andrés
Sarah Ferguson, el príncipe Andrés y Jeffrey Epstein (INFOBAE ESPAÑA).

El escándalo que une al príncipe Andrés y Sarah Ferguson con el pedófilo y traficante de personas Jeffrey Epstein sigue generando titulares, arrastrando inadvertidamente a sus hijas, las princesas Beatriz y Eugenia, al centro de la polémica. Y es que nuevos correos electrónicos, nunca antes revelados, sugieren que Epstein no solo brindó apoyo económico a Sarah, sino que, según los documentos, la exduquesa de York habría llevado a sus hijas a visitarlo tras su salida de prisión.

Los correos en cuestión habrían sido enviados por Epstein a su abogado Paul Tweed en 2011, apenas un mes después de que Ferguson ofreciera una entrevista en la que pedía disculpas por sus vínculos con el financiero y aseguraba que “nunca más volvería a tener nada que ver con Jeffrey Epstein”. Sin embargo, según los mensajes filtrados por el Daily Mail, Epstein afirmaba que Sarah “fue la primera en celebrar mi liberación acompañada de sus dos hijas” y que lo visitó con un policía presente en la recepción de su residencia. No obstante, una fuente cercana a Ferguson asegura al medio que ni ella ni sus hijas recuerdan dicha visita.

Estos correos, de los que se han hecho eco los medios británicos, también muestran que Sarah solicitó sumas adicionales de dinero a Epstein, entre 50.000 y 100.000 dólares, supuestamente para cubrir “gastos pequeños”, y que pidió autorización para visitar su isla privada en el Caribe. Estos documentos se suman a la escalada de desprestigio que lleva acechando a la exmujer del príncipe Andrés desde septiembre de este año, un hecho que ha provocado la ruptura de relaciones con varias organizaciones benéficas que anteriormente habían colaborado con ella.

Quién es quién en la casa real británica: del rey Carlos, el más tardío de la historia, al polémico príncipe Andrés.

“La vida del duque fuera arruinada”

En uno de los correos más llamativos, Sarah se dirigía a Epstein con elogios y disculpas, asegurando: “Siempre has sido un amigo fiel, generoso y supremo para mí y mi familia. Hoy te pido disculpas por no haber respondido antes a tu correo ni haberme puesto en contacto contigo”. Además, continuaba explicando su estado de ánimo por la situación: “Estaba postrada en cama por el miedo. Estaba paralizada. Me aconsejaron claramente que no tuviera nada que ver contigo, ni hablara ni enviara correos, porque de hacerlo podría causarte más problemas a ti, al duque y a mí misma. Estaba destrozada y perdida… No quería lastimar a Andrew una vez más. Tenía un miedo insoportable. Lo siento”.

Horas después de la filtración del mensaje más comprometedor, el portavoz de Ferguson, James Henderson, defendió que el mensaje se envió únicamente bajo coacción, después de que Epstein la amenazara telefónicamente, prometiendo “destruirla” de manera escalofriante. Henderson declaró al Telegraph que la llamada fue “horrible y aterradora”, con Epstein adoptando un tono inquietantemente frío que dejó claro que su intención era intimidar a Ferguson y, por extensión, a su familia. “La presión a la que fue sometida para proteger a su familia debió ser enorme. Estoy seguro de que hubo acciones legales. Y esto fue mucho antes de que la vida del duque fuera arruinada por su asociación con Epstein. Fue hace 14 años y todos harán lo que tengan que hacer para proteger a su familia. Su familia y sus hijos siempre serán lo primero para ella”, señaló Henderson.

La situación tomó un giro dramático el pasado viernes, cuando el príncipe Andrés anunció su decisión de renunciar al uso de sus títulos y honores reales. En un comunicado, explicó que las continuas acusaciones contra él distraen del trabajo de Su Majestad y de la familia real, y reafirmó su negativa a las imputaciones que se le atribuyen. “Con el consentimiento de Su Majestad, creemos que debo dar un paso más. Por lo tanto, ya no usaré mi título ni los honores que me han sido conferidos. Como ya he dicho, niego rotundamente las acusaciones en mi contra”, dijo el duque, dejando claro que su decisión responde a un sentido de deber hacia su familia y su país.

El príncipe Andrés y Virginia
El príncipe Andrés y Virginia Roberts (ahora Giuffre). Photo © 2019 Eliot Press/The Grosby Group