El truco para eliminar el musgo de tu jardín: nutre el suelo y extrae la humedad

Las soluciones preventivas y los remedios caseros erradican el musgo que nace en espacios húmedos y a la sombra

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Musgo retirado de una zona
Musgo retirado de una zona verde. / Secretaría de Ambiente

La llegada del otoño lleva consigo el aumento de la humedad, la lluvia y los muchos seres vivientes que aparecen con la nueva estación. El musgo es uno de ellos, sobre todo en lugares frescos y con sombra, ya sea en bosques, sobre las rocas o en los troncos de los árboles. No obstante, hay un lugar especialmente molesto para los amantes de la jardinería en el que crecen estos seres verdes y mullidos: el césped. ¿Pero cómo conseguir erradicar el musgo del césped?

La jardinería es un arte con muchas aristas que superar para rozar la perfección. Entre las dificultades de estas labores está la de mantener vivas las plantas, al mismo tiempo que no regarlas de más. El resultado de no prestar suficiente atención, en el caso del césped, es que la acumulación de agua produce la aparición de musgo y la escasez de esta, lo seca. Aunque, con el otoño y el aumento de las precipitaciones suele darse la primera premisa. Esta acumulación de agua es peligrosa, no solo para las plantas, sino también para el ser humano, dado que el musgo se convierte en una pista resbaladiza.

Pese a que la jardinería no sea una tarea siempre sencilla, sí lo es erradicar el musgo que puede aparecer en el césped por exceso de agua acumulada. Lo único que se necesita es aportar hierro al jardín, ya que reduce el pH del suelo y extrae la humedad. Al mismo tiempo, nutre el sustrato del césped porque actúa como micronutriente.

Dónde encontrar hierro para el jardín

La solución de aportar hierro al sustrato de césped para erradicar el musgo del jardín posee distintas soluciones para su aplicación. Estas pueden ser comerciales o caseras, dependiendo de cuánto se atreva cada amante de la jardinería a improvisar.

En lo que respecta a las propuestas comerciales, destacan tres. La primera es adquirir sulfato de hierro, un químico que acidifica el suelo. Este puede encontrarse en polvo, granulado o disuelto en agua y puede adquirirse en tiendas de jardinería. Su aplicación debería ser mensual. Por otro lado, los quelatos de hierro actúan con mayor rapidez, pero su durabilidad es menor. Este compuesto es absorbido rápidamente por el césped, igual que algunos fertilizantes líquidos con micronutrientes entre los que debe encontrarse, para cumplir el propósito planteado, hierro.

Si se quiere evitar el uso de soluciones comerciales, también hay algunos trucos manuales que pueden ser útiles. Por ejemplo, utilizando un rastrillo puede eliminarse el musgo que se encuentre a la vista. Aunque para más seguridad, puede hacerse sulfato de hierro, una solución a base de óxido que ayudará a erradicar el musgo. Esta propuesta consiste en bañar en agua objetos de metal (tornillos, por ejemplo) y dejarlos el tiempo suficiente para que se oxiden. El resultado será agua sucia repleta de hierro. Esta podrá esparcirse por el jardín o, incluso, diluirse un poco en más agua.

El chollo de regentar la cafetería de los jardines del Palacio Real: 432.000 euros de ingresos al año cuando solo se paga un canon de 39.500 euros al Estado.

También existen alternativas caseras como son las medidas preventivas. En primer lugar, debe regularse el mal drenaje que se esté dando al jardín. Este provoca encharcamientos no deseados. Por otro lado, se deben evitar las zonas de sombra en exceso, dado que no dan tiempo a que el sol seque esas zonas y acaban condensando más humedad.