Bernat Escolano, mecánico: “Tú cobras la indemnización y el coche pasa a subasta, o lo vendes. Y ahí es donde entramos nosotros”

“La llegada de un coche al desguace no marca su final, sino un paso más en la vida del mismo. Se acaba su vida útil, pero comienza otra distinta”, explica el mecánico en una publicación en redes

Guardar
Bernat Escolano, mecánico: “Tú cobras
Bernat Escolano, mecánico: “Tú cobras la indemnización y el coche pasa a subasta, o lo vendes. Y ahí es donde entramos nosotros” (Wikimedia Commons, Montaje Infobae)

Los desguaces ya no se llaman desguaces: ahora son Centros Autorizados de Tratamiento de Vehículos. El cambio de nombre refleja una transformación en los procedimientos y la percepción social sobre estos lugares. Según explica Bernat Escolano, mecánico en Reciclauto y conocido en redes sociales como @berniedeldesguace, el destino de un coche en estos centros ya no significa su final definitivo, sino una etapa más dentro de su ciclo. “La llegada de un coche al desguace no marca su final, sino un paso más en la vida del mismo. Se acaba su vida útil, pero comienza otra distinta”, describe Escolano en uno de sus vídeos publicado recientemente en su perfil de TikTok, en el que cuenta con más de 254 mil seguidores y a través del cual comparte información y consejos sobre su profesión.

La segunda vida de un coche en un desguace

De acuerdo con el mecánico, el proceso arranca desde el primer inventario. El coche se clasifica, se evalúan todas sus piezas y, en función de su estado, estas se reutilizan, reciclan o son desechadas. De acuerdo con el mecánico, “con esto se ha logrado cambiar la percepción que antes teníamos de los desguaces”. Aun así, Escolano reconoce que existe algo que todavía sorprende a muchos visitantes: “Pero hay una cosa que nos sigue sorprendiendo cuando acudimos a un Centro Autorizado de Tratamiento de Vehículos: esos coches prácticamente ‘a estrenar’ que acaban allí sin saber muy bien por qué”, explica.

“Un desguace no compra coches por lo bonitos que están, sino por lo que pueden dar”, explica el mecánico mientras muestra, como ejemplo, un Kia Stonic de apenas cinco años. Su historia arranca tras un accidente declarado como siniestro total por la aseguradora. Escolano lo expone así: “Este Kia Stonic de solo 5 años ha tenido un accidente. El seguro lo da siniestro total. Lo primero es saber qué pasa con el coche. Spoiler: no siempre acaba en la chatarra. Tú cobras la indemnización y el coche pasa a subasta, o lo vendes por tu cuenta. Lo que te salga más rentable. Y ahí es donde entramos nosotros”.

Imagen de archivo de un
Imagen de archivo de un desguace. (Europa Press)

El siguiente paso consiste en aprovechar todo lo rescatable. Escolano detalla: “Aunque este Stonic tiene un golpe detrás, hay muchas piezas que se pueden recuperar: interior intacto, motor completo, electrónica funcionando, faros, pantallas, sensores, puertas… Me vas siguiendo, ¿verdad?”. En ese punto, comienza una nueva vida para el vehículo: “Cada pieza se desmonta, se revisa y se pone en circulación otra vez. ¿Y qué consigues con esto? Evitas que alguien tenga que comprar piezas nuevas, no generas más residuos - ya sabes, somos ecológicos - y consigues repuestos originales mucho más baratos”, explica.

“Ya sé lo que estás pensando: menudo chollo, os hacéis de oro. Y la respuesta es fácil: si da tanto dinero, hazlo tú. Que sí, que tú y tu primo arregláis este Kia y lo vendéis rápido”, pero lo mejor será delegar en los profesionales. Bernat remata con una reflexión de impacto sobre el potencial de la reutilización: “Gracias a este, otros veinte Stonic van a seguir rodando”.