Esta es la planta más fácil de cuidar, según un especialista: “Solo hay que cambiarles el agua cada una o dos semanas”

Simbolizan la tranquilidad, la paz y el amor. Cuidarlas es fácil, accesible y gratificante: viven hasta 200 años

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Simbolizan el amor, la paciencia
Simbolizan el amor, la paciencia y la estabilidad en el hogar. (Composición Fotográfica/Canva)

Esta planta, originaria de Japón, es un símbolo de calma, belleza minimalista y sostenibilidad. Cuidarla es fácil y sencillo y, si lo haces bien, puede llegar a vivir hasta 200 años, convirtiéndose en una auténtica reliquia viviente.

Se llaman Marimo, y son una especie única de alga verde, Aegagropila Linnaei Kutzing. Se pueden encontrar en lagos de agua fría de Japón y norte de Europa, y crecen lentamente con forma de esferas verdes y aterciopeladas.

En realidad, no se trata de una “planta” tradicional, sino de una agrupación de filamentos de alga que se unen formando una estructura esférica.

Con el tiempo, cada Marimo puede alcanzar un tamaño sorprendente, aunque solo crezca unos milímetros cada año. Su lentitud de expansión simboliza la paciencia y la perseverancia en la naturaleza. En su hábitat original, son la corriente y el movimiento suave del agua los que le dan su característico movimiento giratorio.

Cuidar tu Marimo es fácil: no hacen falta fertilizantes ni cuidados complejos. Así, se convierten en el amigo perfecto de los principiantes, pero también de los expertos amantes de la naturaleza.

Un símbolo del amor eterno

En la cultura japonesa, los Marimo son símbolo del amor eterno y la buena suerte. La mitología japonesa narra la historia de una pareja de enamorados que se refugió en las orillas del lago Akan, el lugar de origen de los Marimo, para escapar de sus familias que intentaban separarlos.

Según la tribu Ainu, después de su muerte, sus corazones se transformaron en Marimo. Así, su amor iba a perdurar para siempre. Desde entonces, los lugareños consideran al Marimo un guardián del amor verdadero y la eternidad.

En el lago Akan, cada año se celebra un festival dedicado a estas algas queridas. Allí, voluntarios limpian el fondo del lago para proteger los Marimo y fomentar su conservación.

Hoy en día, los festivales dedicados al Marimo celebran su valor cultural y fomentan la preservación ambiental.

De estas formas, nuestras plantas estarán más saludables

Así, un Marimo no solo decora, sino que cuenta una historia viva y simbólica. Es considerado un amuleto de buena fortuna por muchos japoneses, y se regala como gesto de esperanza y longevidad a las nuevas parejas o como símbolo de armonía en el hogar.

Características del Marimo

Los Marimo tienen una textura suave y un color característico verde vibrante. Crecen muy lentamente, apenas unos milímetros por año. Así, se convierten en compañeros longevos.

Si los observas de cerca, descubrirás que su superficie es ligeramente aterciopelada y cubierta de finos filamentos. Este manto es el que le confiere esa apariencia tan característica y le ayuda a captar la luz para la fotosíntesis.

Su forma esférica tiene una función práctica: al girar lentamente en el fondo del lago, todas sus caras reciben la luz de manera equitativa. Así se evita la decoloración por exposición prolongada.

Además, su estructura porosa retiene pequeñas cantidades de oxígeno que se genera durante la fotosíntesis. Eso lo hace flotar de vez en cuando.

Igualmente, es completamente normal que permanezca en el fondo y no muestre burbujas, especialmente durante las mañanas o las épocas de frío.

Su aparente “tranquilidad” forma parte de su naturaleza pausada.

¿Cómo cuidar tu Marimo?

Estos simples consejos de Slow Botanics te ayudarán a cuidar de tu Marimo de la mejor forma posible:

  • Coloca el recipiente en un lugar fresco.
  • Evita que el sol le ilumine de forma directa.
  • En verano, ocasionalmente viene bien ponerle un cubito de hielo.
  • Cambia el agua cada dos semanas, en verano, cada semana.
  • Si tu Marimo pierde su color verde, colócalo durante 24 horas en la nevera.

Para limpiar tu Marimo:

  • Sácalo del agua con cuidado.
  • Colócalo debajo de agua limpia y fresca.
  • Muévelo suavemente entre tus manos.
  • No uses jabón o productos químicos.

Los Marimo traerán a tu hogar el equilibrio, la paciencia y la paz con la que crecen poco a poco.