Cómo una pareja perdió casi 150.000 euros frente a empresas de apuestas sin apostar ni una sola vez: “Simplemente te derrumbas”

Un matrimonio vio desaparecer sus ahorros tras confiar en un consultor financiero que le prometía una inversión de alto interés, pero acabó desviando el dinero sin su consentimiento

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Una familia revisa revisa sus
Una familia revisa revisa sus cuentas (Montaje Infobae con imágenes de Canva)

En vísperas de Navidad, los australianos Aimee y Nick Mazza recibieron la noticia devastadora de que habían perdido casi 150.000 euros que, hasta entonces, pensaban que estaban seguros en una inversión de alto interés. Sin haber apostado nunca, vieron cómo sus ahorros desaparecieron, devorados por las casas de apuestas a través de una trama de estafa orquestada por su propio asesor financiero.

“Ha afectado a nuestros hijos. Ha afectado a toda nuestra familia. El impacto mental que ha tenido en nosotros, especialmente en Nick. Ha sido realmente difícil”, relató Aimee Mazza, oficial de policía, a la ABC.

La catástrofe financiera de los Mazza se debe a las acciones de Anthony Del Vecchio, consultor financiero de Freedom Finance. Hace casi dos años, él les ofreció una supuesta oportunidad de inversión en depósitos a plazo fijo con un rendimiento muy superior al habitual. Sin embargo, la realidad era muy distinta: en tan solo unos meses, Del Vecchio había desviado todo el dinero depositado, apostándolo sin consentimiento en 52 casas de apuestas online.

Nos enteramos justo antes de Navidad que nuestro dinero se había ido”, explicó Aimee Mazza a ABC. Para Nick Mazza, el golpe fue brutal: “No podía hacer nada. Simplemente no sabes a dónde acudir. No sabes qué decir. Ni siquiera sabes cómo sentirte. Simplemente te derrumbas”, confesó.

Del Vecchio, que operó del mismo modo con más de 30 clientes, malversó un total próximo a 4,5 millones de dólares australianos -cerca de 2,5 millones de euros-, que terminaron en las cuentas de distintas plataformas de apuestas. En abril de este año, el ex asesor fue condenado a siete años y medio de prisión. Sin embargo, las casas de apuestas pudieron quedarse con las sumas apostadas ilegalmente.

Nick Mazza cuestiona duramente la permisividad legal: “Ninguna otra industria podría quedarse con el producto del delito. Entonces, ¿por qué a ellos se les permite quedárselo? No es su dinero y, desde luego, yo no les autoricé a tenerlo. Así que lo quiero de vuelta”.

El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, ha informado de que el Ministerio impuso sanciones superiores a los 140 millones de euros a operadores del sector de las apuestas y los juegos de azar online en España durante el año 2024. "El principio es garantizar la protección y los derechos de los consumidores y combatir el fraude y las prácticas abusivas", ha señalado. (Fuente: Senado / Europa Press)

El foco en la impunidad de las casas de apuestas

Durante el juicio, la magistrada Gabriele Cannon hizo hincapié en el papel que desempeñaron las casas de apuestas, señalando la falta de ética en sus prácticas. “Las prácticas empresariales de estas casas de apuestas encarnan la expresión ‘la banalidad del mal’ en mi opinión, y es asombroso que puedan operar en nuestra comunidad de la manera que he descrito, con impunidad”, afirmó durante la vista.

Entre las empresas implicadas en el caso figuraba MintBet, gestionada por Casey McCutcheon, quien además asumía las funciones de responsable de riesgos y cumplimiento. Del Vecchio habría perdido cerca de 1 millón de dólares (560.000 euros) solo en esta plataforma. Interrogado sobre los controles de origen de los fondos utilizados por Del Vecchio y la posible devolución a las víctimas, McCutcheon evitó responder, negándose a hacer declaraciones públicas.

La defensora del consumidor Lauren Levin denunció la incompatibilidad de funciones de McCutcheon: “Una sola persona no puede desempeñar esa cantidad de funciones. No puedes cuidar el bienestar del cliente y al mismo tiempo cuidar las ganancias de tu empresa y todo el cumplimiento”, aseguró a ABC.

Por su parte, la víctima Aimee Mazza sostiene que las casas de apuestas deberían reparar a las personas perjudicadas: “Si viera a Casey McCutcheon, simplemente le diría: no sé cómo te levantas cada mañana y piensas que lo que haces está bien. Estás viviendo con nuestro dinero”.

Demanda social de responsabilidad

A nivel político, El diputado Andrew Wilkie describió la falta de acción legislativa como un respaldo implícito a la industria: “El hecho de que a nivel federal, tres veces el gobierno y la oposición hayan fallado en actuar, me demuestra que siguen protegiendo a la industria del juego. Creo que cualquier australiano razonable diría, si sabemos quién tiene el dinero, que ese dinero debería devolverse a las víctimas”.

Afectados como la familia Mazza insisten en que nunca es tarde para resarcirles: “No es demasiado tarde para que estas casas de apuestas hagan lo correcto. No es demasiado tarde para devolver el dinero robado. Nunca es demasiado tarde para hacer lo correcto”, concluyó Nick Mazza para ABC.