España sub-20 está al borde del abismo: qué necesita para avanzar en el Mundial

La selección española sub-20 vive horas decisivas en el Mundial de Chile 2025. Tras un arranque complicado, el combinado dirigido por Paco Gallardo debe jugarse todo en la última jornada de la fase de grupos para mantener viva la ilusión de acceder a los octavos de final.

España debutó con derrota ante Marruecos, cayendo 0-2 en un partido donde quedó clara la necesidad de encontrar urgencia ofensiva y solidez defensiva. Esa derrota complica su panorama, pues ahora cualquier empate será insuficiente. En la segunda jornada, el empate 2-2 frente a México fue un resultado agridulce. España remontó con goles de Pablo García e Iker Bravo, este último de penalti, pero el joven Gilberto Mora firmó el doblete del empate para los mexicanos en los minutos finales.

Con este empate, España llega a la última fecha con solo 1 punto en dos partidos, prácticamente obligada a ganar para aspirar a avanzar. En el grupo C, la clasificación otorga pase directo a los dos primeros equipos de cada grupo, al igual que en el resto. Además, los 4 mejores terceros de todos los grupos también pasan de ronda. El grupo C marcha así:

-Marruecos: 3 puntos.

-México: 2 puntos.

-Brasil: 1 punto.

-España: 1 punto.

El escenario ideal para España es sumar 3 puntos ante Brasil y que México no venza a Marruecos. En ese caso, España podría superar en puntos a Brasil y arrebatarle la segunda plaza del grupo. Pero no todo depende de ello, incluso si queda en tercera posición, podría meterse entre los cuatro mejores terceros del torneo, lo que exigiría un buen puntaje (al menos 4 puntos o un criterio favorable de gol) y compararse con terceros de otros grupos.

Sin embargo, un empate ante Brasil ya sería insuficiente, con solo 2 puntos, España quedaría fuera matemáticamente de cualquier lucha por los octavos. Así que, en resumen, la victoria ante la escuadra sudamericana es la única alternativa viable para soñar con avanzar y cualquier cosa que no sea una victoria supondría el final de la selección en el torneo salvo alguna combinación casi imposible.

Brasil, a quien se enfrentará España en la última jornada (sábado 4 de octubre a las 22:00 hora española), es el rival directo para definir el pase y uno de los favoritos. Los brasileños llegan con una derrota ante Marruecos, pero aún con opciones, por lo que no regalarán nada. Otros combinados candidatos al título son Argentina, Francia o Marruecos, que ha demostrado hasta el momento un gran nivel en la competición.

El duelo de España contra Brasil no es un solo partido más, es una final anticipada. Está en juego la continuidad del torneo, la ilusión de una generación y el prestigio del fútbol juvenil español. Si el equipo europeo sale con una victoria convincente, no solo superará a Brasil, sino que podrá controlar su destino sin depender de otras selecciones. Además, dejará claro que puede competir contra las potencias tradicionales y en los momentos decisivos, reforzando la moral del equipo. Por el contrario, si pierde o empata será el fin, misma suerte que el primer partido contra Marruecos dejó a la selección con poco margen de error.

Queda claro que esta generación de jóvenes españoles deben responder con personalidad, afinar su equilibrio defensivo y ofensivo y confiar su talento. El Mundial sub-20 es a menudo escaparate de estrellas emergentes, pero también una prueba exigente de carácter. España está al filo de la navaja, o gana o se desvanece.