Un sacerdote italiano conocido por denunciar a la mafia recibe una bala envuelta en un pañuelo en plena misa: Giorgia Meloni respalda al párroco en redes sociales

El religioso, bajo protección policial, había denunciado horas antes disparos frente a su parroquia y pidió a los jóvenes abandonar el camino del crimen

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La primera ministra de Italia,
La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, junto al sacerdote Maurizio Patriciello (@GiorgiaMeloni)

El sacerdote italiano Maurizio Patriciello, conocido en toda Italia por su compromiso en la lucha contra la mafia y el narcotráfico en la región de Campania, fue víctima este domingo de un acto de intimidación durante la misa que oficiaba en la parroquia de San Pablo Apóstol, en Caivano, un municipio de la provincia de Nápoles marcado por la criminalidad y el abandono institucional.

Un hombre, identificado posteriormente como un delincuente local con antecedentes, se acercó al párroco en el momento de la comunión y le entregó un pañuelo. En su interior se encontraba una bala, gesto interpretado de inmediato como una amenaza directa. El individuo fue reconocido tanto por los agentes de la escolta del sacerdote como por una patrulla de carabineros que vigilaba desde el exterior del templo, según confirmaron varios medios italianos.

El suceso ha generado un amplio eco en Italia, donde Patriciello es considerado un símbolo de resistencia frente a los clanes camorristas que durante décadas han controlado gran parte del territorio napolitano a través de la extorsión, el tráfico de drogas y la violencia.

Amenazas tras denunciar avances contra la camorra

El episodio se produjo apenas unas horas después de que el propio sacerdote denunciara públicamente, a través de sus redes sociales, la existencia de disparos en las inmediaciones de su parroquia durante la noche del sábado. En ese mismo mensaje, Patriciello había resaltado que las operaciones policiales y judiciales recientes estaban asestando un “golpe durísimo” a las estructuras mafiosas en la zona.

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“El comercio de la malditísima droga ha disminuido a la vista. Los jefes de los clanes, casi todos en prisión. El Gobierno actual se está comprometiendo como nunca antes”, escribió. Al mismo tiempo, reconocía que los grupos criminales intentaban reorganizarse para ocupar los espacios dejados por los jefes encarcelados.

Horas antes de iniciar la misa de este domingo, el sacerdote volvió a recurrir a Facebook con un llamamiento a los jóvenes de Caivano. “Chicos, en nombre de Dios, ¡deteneos! Disfrutad de vuestra juventud. El camino que habéis tomado es un callejón sin salida. Siempre termina o en la cárcel o en el cementerio", advirtió, en referencia a la creciente implicación de adolescentes en actividades delictivas.

El contexto de tensión en el municipio se remonta a episodios recientes de gran repercusión mediática. En 2023, Caivano fue escenario de una violación múltiple que conmocionó al país: dos primas de 13 años fueron agredidas por un grupo de seis jóvenes, hecho que puso de nuevo el foco en la vulnerabilidad social y la falta de oportunidades en la localidad.

El apoyo de Meloni

La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, reaccionó de inmediato al incidente y condenó lo ocurrido en términos rotundos. Calificó el acto como “vil y criminal” y reiteró su apoyo al párroco, con quien había visitado Caivano en el año anterior en el marco de la aprobación del conocido como Decreto Caivano, un paquete de medidas destinado a combatir la delincuencia juvenil y reforzar la presencia del Estado en la región.

La primera ministra de Italia,
La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni (REUTERS/Remo Casilli)

“Un gesto inaceptable cometido en el lugar y momento más sagrado, que no intimidará a quienes, como don Patriciello, representan coraje y dedicación a favor de la comunidad y la legalidad. El Estado está con ustedes, y nunca daremos un paso atrás”, afirmó Meloni en un mensaje difundido en la red social X.

El ministro del Interior, Matteo Piantedosi, también expresó su solidaridad mediante una llamada telefónica al sacerdote, en la que le transmitió su respaldo personal y le garantizó un refuerzo inmediato de las medidas de protección.