Jimmy Kimmel regresa a la televisión entre lágrimas y carga duramente contra Donald Trump: “Quizás tenga que publicar los papeles de Epstein”

El humorista fue cancelado por la cadena y regresaba este martes tras un debate nacional sobre la libertad de expresión

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Jimmy Kimmel regresa tras suspensión
Jimmy Kimmel regresa tras suspensión (Captura de video/ABC)

Una semana después de la cancelación televisiva más importante de los últimos años, Jimmy Kimmel volvía este martes a la parrilla de ABC con un discurso que combinó emoción, sátira política y reivindicación de la libertad de expresión. El regreso del late night de Jimmy Kimmel Live! se produjo tras la polémica generada por un comentario del humorista sobre el asesinato del activista conservador Charlie Kirk, que llevó a la cadena, propiedad de Disney, a anunciar una suspensión indefinida. Este hecho no pasó desapercibido y provocó una ola de reacciones en su público con un intenso debate en Estados Unidos sobre los límites del humor y la influencia de Donald Trump en los medios.

El propio presidente de los Estados Unidos celebró el ‘fin’ del programa en sus redes sociales: “Felicitaciones a ABC por finalmente tener el valor de hacer lo que era necesario. Kimmel no tiene ningún talento y sus índices de audiencia son peores incluso que los de Colbert, si eso es posible. Eso deja a Jimmy y a Seth, dos fracasados ​​totales, en la cadena de noticias falsas NBC. Sus índices de audiencia también son pésimos. ¡NBC, hagan lo mismo!”. No obstante, una oleada de reacciones consiguieron que el humorista recuperara el formato solo una semana después.

Kimmel inició el programa con una frase que levantó muchos aplausos del público: Como estaba diciendo antes de que me interrumpieran…. Desde ahí, desarrolló un monólogo de casi media hora, tres veces más largo de lo habitual, en el que repasó la polémica, agradeció el apoyo recibido y, con la voz quebrada, aseguró que nunca fue su intención hacer burla del asesinato de un joven.

“Este programa no es importante, lo importante es que vivimos en un país que nos permite tener un programa así (…). Nuestra libertad para hablar es lo que más admiro de este país”, subrayó en un tono más reflexivo que irónico. Kimmel reiteró que siempre quiso mostrar respeto hacia la familia de Kirk y que sus palabras originales habían sido malinterpretadas: “Y lo decía en serio. Todavía lo digo en serio. Nunca fue mi intención culpar a ningún grupo específico de las acciones de un individuo claramente desequilibrado. Intentaba justamente lo contrario”.

El cómico reservó buena parte de su intervención para cuestionar a Donald Trump. “Nuestro líder (Donald Trump) celebra que los estadounidenses pierdan sus medios de vida porque no aguanta una broma”, lanzó, provocando una ovación. Y, en otro momento, ironizó: “Trump ha intentado cancelarme y, en vez de eso, ha forzado a millones de personas a verme. Quizás tenga que publicar los papeles de Epstein para distraer la atención de esto”.

El presidente no tardó en reaccionar en su red social, Truth Social, con unas duras palabras contra la cadena y el presentador. Trump aseguró que ABC había informado a la Casa Blanca de que el programa estaba cancelado y calificó de “incomprensible” su regreso. También se burló de la audiencia y del “talento” de Kimmel: “¿Por qué querrían de vuelta a alguien que lo hace tan mal, que no es gracioso y que pone en peligro a la cadena al presentar basura 99% a favor de los demócratas? Creo que vamos a someter a examen a ABC con esto. A ver qué tal. La última vez que fui tras ellos, me dieron 16 millones de dólares. (...) ¡[Son] Una panda de perdedores!”.

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El apoyo de colegas y del público

El regreso del cómico no solo fue celebrado por la audiencia en el plató, sino también por compañeros de profesión que se encontraban también en directo. Stephen Colbert, Jon Stewart y Seth Meyers dedicaron minutos de sus programas a festejar el levantamiento de la suspensión. Stewart ironizó sobre el boicot a Disney que algunos habían impulsado: “Esa campaña que lanzaron, fingiendo que ibais a cancelar Hulu y Disney+ mientras en secreto hacéis maratón de las cuatro temporadas de Solo asesinatos en el edificio... enhorabuena. ¿No fue interesante descubrir todos los tentáculos que Disney tiene en tu vida diaria?”.

La carta abierta promovida por la ACLU y firmada por más de 400 figuras del cine y la televisión, entre ellos Meryl Streep, Pedro Pascal, Jennifer Aniston o Robert De Niro, también fue mencionada en el monólogo como una señal de que el debate sobre la libertad de expresión atraviesa un momento decisivo. De hecho, De Niro realizó una aparición estelar en la que defendió la necesidad de diferentes posturas políticas: “La expresión no será libre ahora. Si quieres decir algo bonito del pelo del presidente, será gratis; si dices que está tan gordo que necesita dos asientos en el avión de Epstein, serás multado. Quizás con un dedo o dos“, ironió el actor, quien también instó a Kimmel a “elegir las palabras correctas”.

Un hombre sostiene un cartel
Un hombre sostiene un cartel con la cara de Mickey Mouse durante una protesta frente al Teatro Dolby, frente al teatro donde se grabó "Jimmy Kimmel Live!", tras su suspensión por sus comentarios sobre el asesinato de Charlie Kirk, en Hollywood Boulevard, Los Ángeles, California, EE. UU., el 22 de septiembre de 2025. (REUTERS/David Swanson/Foto de archivo).

La libertad de expresión en el centro del debate

Más allá del espectáculo, el regreso de Kimmel volvió a situar la Primera Enmienda en el centro del debate político. “No hay nada más antiestadounidense que cancelar a un cómico”, dijo el presentador, evocando a referentes como Lenny Bruce y Howard Stern. Además, recordó también que la sátira es un pilar de la democracia y que limitarla supone un precedente peligroso.

La suspensión del programa no solo abrió un frente entre el presentador y Trump, sino también entre cadenas. Algunas emisoras afiliadas a ABC, como Sinclair y Nexstar, decidieron no emitir el regreso del late night. El regulador federal Brendan Carr, señalado por haber presionado a ABC, también fue blanco de críticas. Kimmel recordó un antiguo tuit suyo en el que defendía la sátira política y lo calificó de “lo más vergonzoso que tienen los republicanos”.

La propia Disney justificó la suspensión inicial asegurando que buscaba “no agravar la situación en un momento delicado para el país”. Sin embargo, tras conversaciones con el presentador, decidió devolverle su espacio. Por ello, en directo y en tono humorístico, Kimmel fingió leer un comunicado oficial de la compañía durante su monólogo. Pero en realidad, eran las instrucciones para reactivar las cuentas de Disney+ y Hulu, canceladas por miles de usuarios en solidaridad con él.