Criar a un hijo es un 60% más caro que hace 20 años: 335.000 euros desde que nace hasta que se independiza

Los últimos datos del INE, de 2023, registraron la cifra más baja de nacimientos desde que hay datos, y marcan un descenso del 4,96% respecto a 2021

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Criar a un hijo es
Criar a un hijo es un 60% más caro que hace 20 años. (Montaje Infobae España con imágenes de Canva)

Tener o no hijos no es algo que se pueda decidir a la ligera. Además de la responsabilidad que implica la crianza de un menor, el coste económico actual de hacer crecer a la familia en España es cada vez más alto, y los españoles nos lo pensamos cada vez más. Así lo reflejan los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), que señalan que España cuenta actualmente con la cifra más baja de nacimientos desde que hay registros.

Al incremento de un 60% del precio de la maternidad y paternidad se le suma la dificultad de acceder a una vivienda digna, lo que hace más complicado la independencia de los jóvenes que están en edad de tener hijos, y los salarios tan justos que, en ocasiones, no llegan a cubrir los gastos diarios.

Y es que, un informe realizado por Raisin pone cifras concretas a esta problemática. La plataforma de ahorro estima que el gasto para criar a un hijo hasta su emancipación supera los 335.000 euros: el coste desde su nacimiento hasta los 31 años se estima en 335.837 euros en el caso de los chicos y 330.277 euros para las chicas, en línea con el tiempo medio que cada uno permanece bajo la protección de la economía familiar.

La carga económica de la emancipación retrasa la independencia de los jóvenes

Según Raisin, esta tendencia se explica por dos factores: los hijos tardan cada vez más en independizarse, lo que amplía el periodo de apoyo, y los costes asociados a educación, sanidad, alimentación y vivienda no han parado de subir en los últimos años.

¿Cuál es el coste total
¿Cuál es el coste total de tener un hijo? (Imagen y datos de Raisin)

En el último año, la edad media de emancipación se ha situado en los 30,5 años para hombres y 29,4 años para mujeres, tal y como revelan los datos de Eurostat. Esta diferencia responde a que ellas suelen independizarse antes que ellos, lo que reduce levemente el coste total asumido por las familias. El informe de Raisin también evidencia que solo un 42% de los menores de tres años accede a guarderías públicas, lo que obliga a la mayoría de las familias a asumir más gastos en cuidados y educación privada, o depender de una red de apoyo dentro de su entorno cercano o familiar.

La investigación resume que tener un hijo en 2025 cuesta un 60% más que en 2002. El gasto alcanzaba entonces 209.963 euros, lo que representa un gran salto en tan solo una generación. Pese a esto, los salarios no han seguido este ritmo. De acuerdo con los cálculos de Raisin, el primer año de vida de un bebé puede suponer un desembolso estimado de 11.586 euros, lo que representa el 38% del salario medio anual de un hombre, y el 45% del de una mujer. Si contamos con que se destina el 5% del salario al ahorro, cubrir ese gasto requeriría más de siete años y medio para los padres y más de nueve para las madres.

Solo el 71% de las madres trabaja tras el nacimiento de un hijo, frente al 90% de los padres

Las cifras de empleo tampoco acompañan a la conciliación ni a la equidad en el reparto de tareas y cargas. La tasa de empleo entre las madres está en un 71%, frente al 90% de los padres, lo que impacta en los ingresos disponibles y en la autonomía familiar. El informe de Raisin también recoge que el nacimiento de un hijo sigue afectando a las carreras profesionales de las mujeres, ya que son ellas las que asumen la mayor parte del trabajo doméstico y de cuidados. Según el Instituto de la Mujer, ellas gestionan el 70% de estas tareas, lo que las expone a un coste de oportunidad laboral y salarial.

Baja de maternidad en 2025: cuánto se cobra, cuántas semanas son y requisitos

Además, los datos del INE constatan una caída sostenida en la natalidad. España cerró 2023 con solo 320.656 nacimientos, mínimo histórico desde 1941. El descenso es de un 4,96% respecto a 2021 y acentúa la brecha demográfica, ya que el porcentaje de población mayor de 65 años supera ya el 20% del total nacional.

A todo esto se le añade la casi imposibilidad de acceder a una vivienda en propiedad o alquiler con precios accesibles. El encarecimiento de la vivienda y la precariedad laboral fuerzan que los jóvenes tengan que permanecer durante más tiempo en el hogar familiar, lo que retrasa sus proyectos vitales.

Asimismo, el informe subraya que la brecha de género tampoco se cierra en materia de conciliación ni empleo. Según datos de 2023, la tasa de empleo de los padres con hijos menores de 12 años aumenta incluso sobre la de quienes no los tienen, al contrario de lo que ocurre con las madres. En una encuesta de 2020, el 72% de las mujeres consideró muy difícil o imposible compatibilizar vida profesional y familiar tras el nacimiento de un hijo, frente al 60% en el caso de los hombres.