España recibe 1.000 millones de euros de los fondos SAFE para invertir en defensa: ingresa la tercera cantidad más baja

La UE divide los posibles usos de este dinero en dos categorías, que incluyen munición, misiles o ciberdefensa

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Inversión en defensa UE (REUTERS/Amel
Inversión en defensa UE (REUTERS/Amel Emric)

El Ministerio de Defensa recibirá a finales de noviembre un préstamo de 1.000 millones de euros para incrementar el gasto militar, si Bruselas aprueba su plan de inversiones en defensa. La Comisión Europea ha publicado el reparto de los fondos del SAFE (Acción por la Seguridad de Europa) que reparte un total de 150.000 millones de euros.

España fue el país que menos cantidad solicitó, junto a Finlandia. Estas ayudas se tratan de préstamos europeos para fomentar el desarrollo en defensa, lo que implica una devolución futura con un plazo de 45 años. De los Estados miembros del organismo, 19 han solicitado dinero a partir de este sistema.

La cantidad que conseguirá España es la tercera más baja dentro de la lista de reparto entre naciones. Las diferencias son enormes entre lo pedido y recibido por cada país, lo que señala a aquellos que apuestan en mayor medida por la defensa, aunque en el futuro suponga una gran deuda, frente a países que quieren evitar un mayor endeudamiento.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha enviado una carta al secretario general de la OTAN, Mark Rutte, en la que le traslada que España no puede comprometerse a aumentar el gasto en defensa al 5% del PIB en la cumbre de la semana que viene y le plantea que o bien se haga una excepción o que el objetivo sea opcional". (Fuente: EUROPAPRESS)

Reparto de los préstamos del SAFE

El reparto económico de este instrumento tiene unas cantidades muy desiguales, según las intenciones y posibilidades de cada uno en el ámbito de la defensa. Polonia, que lleva años con gran crecimiento y se está posicionando como uno de los países con el mayor desarrollo militar, ha recibido la mayor cantidad, con 43.734 millones de euros.

Rumanía, con 16.680 millones, Francia, con 16.216 millones, e Italia, con 14.900 millones, son los países siguen en las siguientes posiciones de los fondos SAFE, cuyo total alcanza los 150.000 millones de euros. Por el contrario, entre los que obtendrán menores cantidades se encuentran Dinamarca, con 46,8 millones, Grecia, con 787,7 millones, y Finlandia y España, con 1.000 millones.

La Comisión tiene diferentes objetivos con estos préstamos. El primero, y más evidente, es el desarrollo militar de los Estados miembro. Junto a esto, también busca fomentar el crecimiento de las empresas especializadas europeas. Por ello, exige que el gasto en compañías que no sean de la UE, el Espacio Económico Europeo o Ucrania no supere el 35% del total.

El presidente del Gobierno ha defendido la necesidad de que la UE se dote de una verdadera política de seguridad y defensa (Congreso/Europa Press)

En qué invertirá España el dinero

El Consejo Europeo estableció una jerarquía de las distintas secciones en las que se puede invertir, dividiéndolo en dos categorías de productos de defensa. La primera incluye munición, misiles, sistemas de artillería, equipos de combate en tierra, protección de infraestructuras, ciberdefensa y movilidad militar.

La segunda abarca sistemas de defensa aérea y antimisiles, capacidades marítimas, drones, sistemas estratégicos y tecnología espacial. Los productos de la segunda categoría estarán sujetos a condiciones más estrictas. En ambos casos, con la limitación de dedicar mínimo el 65% a las empresas del bloque comunitario y sus asociados.

Teniendo en cuenta estas normas y restricciones, resulta más complicado dedicar estos fondos a tecnologías duales, que permiten aprovechamientos civiles, o a usos de seguridad. El Gobierno ha explicado en varias ocasiones su inclusión de estas labores de seguridad en el gasto en defensa, de manera que el uso de estos fondos no puede extenderse a todos los objetivos deseados.