Puente anticipa dos años más de incidencias en trenes mientras la red ferroviaria se recupera de una caída del sistema infórmatico esta mañana

El ministro atribuye los problemas al despliegue de nuevos trenes y a la obsolescencia de los actuales, con una demora media de 6,2 minutos y un 68,2% de puntualidad en media y larga distancia

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El ministro de Transportes, Óscar
El ministro de Transportes, Óscar Puente, comparece a petición propia en el Congreso. (EFE/ Chema Moya)

El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha vinculado las numerosas incidencias en la red ferroviaria española a las renovaciones técnicas y ha advertido de que continuarán sucediendo al menos durante los próximos dos años. Estas declaraciones se han dado durante la mañana de este jueves en una comparecencia a petición propia del políticoante el Congreso, al mismo tiempo que se conocía un nuevo episodio de paradas y retrasos en trenes de alta velocidad a Madrid por un fallo informático.

“En los dos próximos años se producirán más incidencias en la red ferroviaria”, ha anticipado Puente, que señala como la principal razón detrás de estos inconvenientes las dificultades derivadas del despliegue de nuevos trenes y la obsolescencia de parte del material rodante existente. En cifras, el retraso medio entre el 1 de enero y el 2 de septiembre fue de 6,2 minutos, con un 68,2% de los trenes de media y larga distancia llegando puntuales. Puente precisó, además, que el 93% de las circulaciones registraron retrasos menores a 30 minutos.

Coincidiendo con la comparecencia, Adif ha confirmado una caída de los servidores informáticos que gestionan el tráfico ferroviario, afectando trenes de alta velocidad con origen o destino en Madrid, aunque aseguran que se está dando una recuperación “gradual” de la situación gracias a la operatividad de los equipos de respaldo.

Llegada de nuevos modelos

La entrada en servicio de los primeros trenes Avril de Talgo de la serie 106 en Renfe ha evidenciado los desafíos de los que habla Puente, ya que dichos vehículos han presentado “problemas”, según señaló el propio ministro. Las últimas revisiones realizadas en la flota que viaja entre Madrid y Barcelona han sacado a la luz una avería que obligó a retirar estos trenes del servicio y provocó afectaciones relevantes en el funcionamiento de la línea. Esta experiencia ha llevado a Puente a advertir sobre el “pecado de juventud” que podrían presentar los nuevos trenes que comenzarán a incorporarse a partir del año próximo, al tiempo que reconoció los problemas derivados de la antigüedad de algunos modelos.

El ministro ha explicado que Renfe recibirá los primeros trenes de Cercanías de las 500 unidades pedidas a inicio del año próximo, con entregas programadas de dos trenes por semana, aunque subrayó la necesidad de continuar ampliando y rejuveneciendo la flota. En esa línea, Puente ha confirmado que ya han mantenido reuniones con fabricantes internacionales como Siemens para analizar futuros encargos.

Ave Renfe (Adobe Stock).
Ave Renfe (Adobe Stock).

Puente ha recalcado la antigüedad de gran parte del material disponible y ha recordado que no se había incorporado un tren de Cercanías desde 2008 ni uno de larga distancia o alta velocidad desde 2010. En esta mismo línea, el ministro ha valorado que “nadie puede poner en duda la voluntad de este Gobierno para mejorar el material móvil”.

Aumentan las incidencias externas

Puente ha descrito el nivel de puntualidad de la red española como el “segundo mejor ratio tras la compañía suiza”, aunque señaló que los resultados no son satisfactorios. El tiempo medio de retraso de trenes de media y larga distancia alcanzó los 16,1 minutos. El peor mes en cuanto a puntualidad en todo tipo de trayectos fue julio, con una media de 10,3 minutos de retraso, que ascendió a 20,4 minutos en el caso de trenes afectados por incidencias.

Otro foco de preocupación para el Gobierno ha sido el crecimiento exponencial de las incidencias ajenas al operador ferroviario: los incendios han crecido un 622% respecto a 2024, afectando a 486 trenes y elevando el porcentaje de causas externas al 23% de las incidencias, a diferencia del 7% del año pasado.