La Policía de Indonesia apunta a un empleado del hotel en el que se alojaba como principal sospechoso de la muerte de Matilde Muñoz

El otro investigado es un antiguo empleado del centro que vivía al lado

Guardar
Los dos detenidos por la
Los dos detenidos por la Policía indonesia que han confesado el asesinato de Matilde Muñoz. EFE/Policía de West Lombok

La Policía de Indonesia ha asegurado este lunes a EFE que la investigación del caso de Matilde Muñoz “continúa “ y que “no ha hecho nada más que comenzar”, y ha confirmado que uno de los sospechosos de su supuesto asesinato premeditado fue un trabajador del hotel donde se alojaba en la isla de Lombok.

“La investigación está en curso”, ha dicho Yasmara Harahap, jefe de Policía en la comisaría de Lombok Occidental, encargada del caso.

Yasmara ha indicado que el presunto asesinato de Muñoz ocurrió la madrugada del 2 de julio en su habitación del hotel Bumi Aditya, en la zona de Senggigi, al oeste de la isla, y que no se espera que se revelen este lunes los resultados de la autopsia de la española.

El policía ha añadido que uno de los sospechosos trabajaba en el hotel cuando Muñoz estaba allí alojada, y que el otro es un antiguo empleado del centro que vivía al lado. “De momento no han implicado a nadie más”, ha explicado a EFE.

Un asesinato por 155 euros

El policía ha indicado que continuarán interrogando a personal del hotel como “testigos” por el momento. Según la versión policial, planearon el crimen con antelación y robaron a Muñoz 3 millones de rupias (unos 155 euros) e intentaron utilizar sin éxito una tarjeta de débito de la española.

Tanto el pasaporte como el teléfono móvil de Muñoz han sido hallados. El móvil fue vendido por uno de los sospechosos a un amigo, según la versión policial.

El cadáver de Muñoz permaneció cuatro días en una habitación de almacenamiento del hotel y después fue trasladado a un montículo de la zona de Senggigi, para posteriormente llevarlo a la playa donde fue encontrado.

El policía ha asegurado que supieron que se trataba de Muñoz porque fue uno de los sospechosos quien confesó dónde lo había enterrado, y que dieron con él durante la investigación porque se encontraba trabajando el día en el que Muñoz desapareció, el 1 de julio, si bien en un principio el hotel dijo haberla visto por última vez el 2.

Esto dicen las pruebas de ADN de la joven que asegura ser la niña desaparecida Madeleine McCann.

Los agentes no quisieron adelantar si habrá más detenciones de sospechosos en el caso de Muñoz.

Las sospechas de la familia

“No solo son ellos dos, hay más gente implicada, así lo creemos absolutamente”, dijo ayer a EFE por mensaje el sobrino de Muñoz, Ignacio Vilariño. Las sospechas del entorno de Muñoz se han dirigido desde el comienzo hacia el hotel en el que se alojaba la septuagenaria desde hacía años.

Desde el hotel dijeron a la Policía que Muñoz les había escrito un mensaje desde Laos el 6 de julio, si bien las autoridades de Inmigración desmintieron que hubiera salido del país.

(Noticia elaborada por EFE)