Una tienda de ropa, una recena y un flechazo: así comenzó la historia de amor de Cristiano Ronaldo y Georgina Rodríguez

Con un rotundo “Sí, quiero. En esta vida y en todas las que vengan”, Georgina Rodríguez ha desvelado en sus redes su compromiso matrimonial con Cristiano Ronaldo, poniendo así un nuevo capítulo a una relación de nueve años llena de complicidad y la construcción de una gran familia.

La noticia, acompañada de una imagen que mostraba el anillo de compromiso, ha desatado una avalancha de felicitaciones y muestras de cariño por parte de sus millones de seguidores, que celebran la futura unión en redes sociales con mensajes llenos de alegría.

Esta boda es la guinda al dulce pastel que la pareja ha cocinado en los últimos años. Cristiano y Georgina se conocieron en Madrid en 2016, cuando ella trabajaba como dependienta en una tienda de Gucci. Según contó el futbolista hace unos años en una entrevista con Telemundo, todo sucedió en un instante: “Fue un momento de una fracción de segundo. Nunca pensé que sería tan grande como para enamorarme de ella, realmente no esperaba eso”, dijo.

Georgina también ha relatado en varias ocasiones que fue un auténtico flechazo. “Era un jueves de verano. Me tocaba salir a las 5, pero un compañero me pidió que me quedara media hora más para atender a una clienta. Cuando estaba saliendo, entró un hombre guapísimo de casi dos metros, acompañado de un niño y un grupo de amigos. El niño me saludó muy educado y se rió. Sentí cosquillas en el estómago y pensé: ‘¿Qué me pasa?’. No quería ni mirarle por la vergüenza”, explicó en su reality Soy Georgina, de Netflix.

A partir de ahí, comenzaron a coincidir más a menudo hasta que, en una ocasión, Cristiano le comentó que asistiría a un evento de moda y le preguntó si ella iría. “Le dije que sí, y estuve todo el día pensando qué ponerme y cómo peinarme. Cuando llegué, estaba guapísimo. Brindamos con champán, pero me tuve que ir a una cena de empresa. Fue bueno, porque nos quedamos con las ganas”, recordó la modelo.

Semanas después, volvieron a verse en otro evento. Cristiano, acompañado de su hermano y unos amigos, la invitó a cenar. “Pensé: ha llegado el momento. Durante el camino nuestras manos se rozaron, y al segundo choque, nos las cogimos. Encajaban a la perfección”, relató Georgina.

Entre risas, también recordó cómo un día intentó resistirse a escribirle, pero acabó cenando dos veces: “Me moría de ganas de verle, pero no le quería escribir. Después de un partido me escribió él y me propuso cenar. Ya había comido, pero acepté. Recené en su casa como toda una señora”. Esa naturalidad cautivó al futbolista, que confesó tiempo después que le parecía “una chica superinteresante y madura”.

Cuando comenzaron su relación, Cristiano ya era padre de Cristiano Jr. En 2017 llegaron los mellizos Eva y Mateo, nacidos por gestación subrogada, y ese mismo año nació Alana Martina, la primera hija biológica del futbolista con Georgina.

En 2022, la familia creció con la llegada de Bella Esmeralda, aunque el momento estuvo marcado por la pérdida de uno de los mellizos que esperaban. Pese a las dificultades, la pareja siempre ha expresado su amor por la paternidad y lo felices que están con su familia numerosa: “Es un regalo de la vida. La llegada de nuestros hijos ha sido lo más grande que nos ha pasado”, afirmó Cristiano en El País.