Un grupo de amigos salió a hacer senderismo y la excursión terminó en tragedia: “Empezó a tener calambres mientras nadaba en el lago’‘

Sucedió en Washington, en las inmediaciones del lago Colchuck. Un grupo de amigos quedaron para hacer una ruta de senderismo el pasado 3 de agosto. La ruta prometía ser el momento perfecto en el que pasar tiempo juntos y desconectar de la rutina diaria. Naturaleza, aire libre, un lago en el que poder bañarse. Además, era el día perfecto en el que caminar en compañía. Un sol radiante iluminaba el paisaje natural del lago donde imponentes cordilleras montañosas se levantaban.

El lago Colchuck es conocido por ser un lago alpino que se encuentra a unos 1.750 metros de altitud. Sus aguas, de color turquesa, rodeadas de una escena montañosa monumental, atraen a cientos de caminantes durante los meses estivales. El acceso principal es a través de una caminata de aproximadamente 13 km ida y vuelta, con un desnivel considerable, lo que lo convierte en un destino popular entre excursionistas con cierta trayectoria.

El lago es especialmente visitado en verano y principios de otoño, cuando las condiciones climáticas son más favorables y los senderos están libres de nieve. Su belleza escénica y la cercanía con otros destinos de la zona lo convierten en un punto de partida para rutas más complicadas, como el paso Aasgard.

Sin embargo, la belleza escénica de este paisaje duró poco para este grupo de amigos. Como informa el medio digital Midi Libre, cuando llegaron al lago, decidieron detenerse a descansar y reponer fuerzas. Debido a las buenas temperaturas del verano, decidieron ir a nadar al lago.

Pocos minutos después de ingresar al agua, uno de los amigos, un hombre de 30 años, comenzó a experimentar fuertes calambres musculares. De inmediato, sus amigos se lanzaron a ayudarlo, según informó Wral News, pero el joven no logró mantenerse a flote y se hundió hasta desaparecer bajo la superficie. Permaneció sumergido aproximadamente cinco minutos antes de que lograran sacarlo y llevarlo a la orilla.

En tierra, sus compañeros iniciaron maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) mientras aguardaban la llegada de los equipos de emergencia. El rescate aéreo transcurrió alrededor de una hora y media después, utilizando un helicóptero para su traslado. El excursionista fue llevado de urgencia al hospital, pero, a pesar de los esfuerzos médicos, falleció esa misma noche.

Este accidente pone de manifiesto una de las problemáticas de seguridad pública más urgentes de todos los veranos: la seguridad de los bañistas en piscinas y aguas abiertas. La web digital especializada en natación, Arena Swim, aporta algunos consejos importantes que es fundamental tener en cuenta a la hora de nadar en aguas abiertas. Lo más interesante, explican, es entender que el nado en un lago no es similar al de las piscinas. Aquí no hay puntos de referencia y las aguas se mueven con una mayor espontaneidad. Es por ello que recomiendan situarse en la medida de lo posible cerca de las orillas donde haya un fácil agarre. Asimismo, insisten, en siempre ir acompañado de un amigo que, en caso de problemas físicos o inseguridad, te pueda ayudar a recomponerte.