La ola de calor alcanza máximos de 44 °C y la Aemet no descarta que sigan subiendo en los próximos días

La Aemet advierte que el episodio más intenso del verano podría prolongarse hasta final de semana, con noches tórridas en buena parte del país

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Una persona trata de calmar
Una persona trata de calmar el calor sofocante que vive Europa en estas jornadas de agosto. EFE/Manuel Bruque

La ola de calor que atraviesa España ha alcanzado su punto más crítico esta semana. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha informado que los termómetros superarán en la jornada de hoy los 44 °C en varias zonas de Andalucía, y aunque se espera un freno del aumento térmico, no descarta que los días venideros traigan nuevos repuntes térmicos.

Este martes será el día más extremo del episodio hasta ahora ya que se esperan máximas cercanas o superiores a los 44 °C en localidades del valle del Guadalquivir, especialmente en la provincia de Sevilla, donde el aviso meteorológico está en nivel rojo (el máximo), lo que exige extremar todas las precauciones para evitar golpes de calor. Pero el calor no se limita al sur; prácticamente todo el país está bajo algún tipo de aviso. Provincias de la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha, Madrid, Aragón, Navarra, País Vasco, Canarias y otras regiones del interior soportan temperaturas extremadamente altas o están alertas por posibles tormentas asociadas al calor

Alivio temporal con incertidumbres

Había expectativas de que entre el miércoles y el jueves se registrara un alivio térmico en el norte peninsular, especialmente en la vertiente cantábrica, según Aemet. Sin embargo, esta bajada de temperaturas no es definitiva: el organismo advierte que a partir del jueves podría producirse un nuevo aumento térmico, sobre todo en el noreste y el valle del Ebro, lo que prolongaría el episodio de calor durante buena parte de la semana. Se trata de la ola de calor más larga del verano, iniciada el domingo 3 de agosto y podría superar la duración prevista inicialmente hasta el martes 12.

Noches que no dan tregua y riesgos sanitarios

El calor tampoco da tregua por las noches, con “noches tropicales” en las que las temperaturas mínimas se mantienen por encima de los 27–28 °C en amplias zonas del país. Esta ausencia de un respiro térmico impide que el organismo recupere energías tras la exposición diurna y favorece la acumulación de estrés térmico, lo que incrementa el riesgo de problemas de salud. Los efectos se notan especialmente en personas mayores, niños pequeños y pacientes con enfermedades crónicas, que son más vulnerables a sufrir golpes de calor, deshidratación o descompensaciones de patologías previas.

Una persona trata de calmar
Una persona trata de calmar el calor sofocante (EFE/Manuel Bruque)

Las autoridades sanitarias han advertido que este fenómeno incrementa el riesgo de golpes de calor, deshidratación y agravamiento de patologías cardiovasculares y respiratorias. Para minimizar estos riesgos, recomiendan beber agua con frecuencia aunque no se tenga sed, evitar las bebidas alcohólicas o muy azucaradas, reducir la actividad física intensa en las horas más calurosas del día, y utilizar ropa ligera y transpirable.

Asimismo, se aconseja buscar ambientes frescos o climatizados, ventilar las viviendas durante las horas más frescas y, si se convive con personas vulnerables, prestarles especial atención para detectar síntomas de malestar como mareos, dolor de cabeza o confusión. En caso de sospecha de golpe de calor, es fundamental actuar con rapidez y solicitar asistencia médica inmediata.

Más allá del termómetro: incendios y calidad del aire

El impacto de esta ola de calor no se limita a las temperaturas extremas. La combinación de calor, aire seco y viento ha favorecido la proliferación de incendios forestales. En zonas como Tarifa, Madrid y Galicia, miles de personas han sido evacuadas mientras los servicios de emergencia luchan contra el fuego.

Además, la calidad del aire se ha deteriorado notablemente, con niveles elevados de ozono troposférico que superan los umbrales recomendados por la OMS, lo que agrava los riesgos para quienes padecen enfermedades respiratorias.

El incendio se está perimetrado y ha evolucionado favorablemente durante la noche. Han estado trabajando en la extinción 33 dotaciones de bomberos de la Comunidad, 11 de Madrid y 9 de la UME y agentes forestales. No hay ninguna carretera cortada al tráfico (Fuente: @112cmadrid).