Detienen a una conductora bajo los efectos del alcohol y drogas: intentó sobornar a los agentes con dinero y un ‘striptease’ para que la dejasen ir

La mujer, de unos 40 años y con el carné de conducir suspendido, fue interceptada en un control rutinario en el sur de Francia y será juzgada en enero de 2026

Guardar
Un oficial de policía francés
Un oficial de policía francés de espaldas (LUDOVIC MARIN/Pool vía REUTERS)

Hay controles rutinarios que terminan siendo cualquier cosa menos rutinarios. Eso es precisamente lo que ocurrió el pasado viernes 1 de agosto en Nyons, una pequeña localidad del departamento de Drôme, en el sureste de Francia. Lo que comenzó como una simple parada de tráfico acabó convirtiéndose en una escena de lo más surrealista cuando una conductora, bajo los efectos del alcohol y las drogas, intentó sobornar a los agentes de la gendarmería… primero con dinero y después con una propuesta tan absurda como insólita: un striptease.

La información, que ha sido publicada por el diario regional Le Dauphiné Libéré, ha causado revuelo tanto por el cúmulo de infracciones cometidas por la conductora como por la manera en que trató de librarse de la sanción. Los hechos han sido confirmados por fuentes policiales y la mujer, de unos cuarenta años y residente en el departamento vecino de Bouches-du-Rhône, ha quedado en libertad con cargos a la espera de juicio.

Conducía con el carné suspendido y dio positivo en alcohol y drogas

Los agentes de la gendarmería se encontraban realizando un control habitual en las inmediaciones de Nyons cuando dieron el alto a un vehículo. Al solicitar la documentación a la conductora, comprobaron que esta tenía el permiso de conducir suspendido. Según informa Le Dauphiné Libéré, el siguiente paso fue realizarle las pruebas de alcohol y drogas, que resultaron positivas en ambos casos.

Lejos de colaborar, la mujer reaccionó con agresividad. Empezó a insultar a los gendarmes y se mostró visiblemente alterada. A pesar de su actitud, los agentes mantuvieron la calma y continuaron con el procedimiento correspondiente, preparándose para su detención. En ese momento, la conductora cambió de táctica.

Un coche de la Policía
Un coche de la Policía Nacional francesa (Flickr)

Del insulto al intento de soborno

Tras los primeros insultos, la mujer decidió intentar “negociar” su libertad. Según recoge el medio francés, primero ofreció una suma de dinero a los agentes para que hicieran la vista gorda y la dejaran marchar. Pero la cosa no acabó ahí: al ver que el soborno no surtía efecto, trató de convencerles proponiéndoles un striptease, en plena vía pública y a plena luz del día.

Los gendarmes rechazaron de inmediato ambas propuestas y procedieron a su detención. Fue trasladada a dependencias policiales, donde quedó bajo custodia antes de ser puesta en libertad con cargos. La justicia francesa ya ha fijado la fecha de su juicio: tendrá que responder por sus actos ante el tribunal en enero de 2026.

Los cargos a los que se enfrenta son múltiples: conducción bajo los efectos del alcohol y las drogas, conducción con el carné retirado, intento de corrupción a agentes de la autoridad y desacato por insultos a funcionarios públicos.

Reconocimiento a la profesionalidad de los gendarmes

En total, 452 personas de las 937 víctimas analizadas dieron positivo en alguna de estas sustancias, lo que representa un 48,2% del total (Fuente: Europa Press).

El comportamiento de los agentes ha sido ampliamente elogiado en Francia, donde el suceso ha trascendido a medios nacionales. La profesionalidad de los gendarmes, que se mantuvieron firmes frente a un intento de soborno tan grotesco como ofensivo, ha sido puesta como ejemplo por diversos colectivos vinculados a la seguridad vial y a las fuerzas del orden.

Desde asociaciones de víctimas de accidentes de tráfico se ha recordado que situaciones como esta, por anecdóticas que parezcan, ponen de relieve la importancia de los controles preventivos, especialmente en épocas de vacaciones, cuando aumentan tanto los desplazamientos por carretera como el consumo de alcohol y drogas.

Francia ha endurecido en los últimos años su legislación para combatir este tipo de conductas al volante, que siguen siendo una de las principales causas de accidentes graves y mortales.