La infanta Sofía se desmarca de su madre y su hermana en los Premios Princesa de Girona: mono de firma española y peinado juvenil

Este 23 de julio, la familia real ha vuelto a desplegar su agenda institucional con motivo de la XVI edición de los Premios Princesa de Girona, una cita dedicada al reconocimiento del talento joven, pero también una ocasión para observar cómo evolucionan los estilos personales de sus miembros más jóvenes. Aunque la princesa Leonor es la gran protagonista por su papel como heredera al trono y titular del galardón, la infanta Sofía se ha consolidado como una figura cada vez más presente y admirada, especialmente por su estilo discreto y refinado.

Durante la ceremonia celebrada en el Gran Teatro del Liceu de Barcelona, Sofía ha vuelto a acaparar miradas sin pretenderlo. La hija menor de Felipe VI ha optado por un mono azul marino de la firma española The-Are, un diseño fluido y asimétrico que destaca por su sofisticación relajada, y que puede conseguirse por un precio de 129,95 euros. Se trata de un look que, a diferencia de su madre y su hermana, quienes acudían al lugar con un traje de chaqueta, está conformado por una única pieza. El conjunto, con escote lateral y manga de gasa semitransparente, proyectaba una imagen moderna, elegante y perfectamente acorde con su edad. Un nudo lateral aportaba un detalle visual interesante sin necesidad de excesos, reforzando esa máxima que Sofía parece dominar a la perfección: menos es más.

El estilismo elegido, que recuerda al que llevó en la graduación de Leonor en Gales hace dos años, resalta la coherencia en su forma de vestir. La infanta ha construido poco a poco una estética propia, basada en líneas sencillas, cortes limpios y colores neutros. En esta ocasión, los zapatos destalonados de charol negro con pulsera al tobillo han complementado el conjunto con discreta sofisticación, mientras que la única joya elegida —el icónico anillo Karen Hallam de su madre, la reina Letizia— le ha añadido un toque simbólico de madurez y vínculo familiar.

El peinado elegido para la ceremonia también ha mostrado un paso más hacia una imagen que demuestra una mayor personalidad: melena suelta con dos trenzas en forma de uve que liberaban el rostro sin perder frescura. Detalles como este, sutiles pero pensados, evidencian que la infanta no solo acierta, sino que marca tendencia desde la serenidad. Además, sacan a relucir su juventud como la benjamina de la familia.

Más allá de la gala, Sofía también dejó huella en el almuerzo institucional celebrado horas antes en el Hotel Eurostars Grand Marina, donde volvió a apostar por un look sobrio pero actualizado. Combinó un pantalón de lino de Zara con un top ajustado y una americana beige de Easy Wear, en sintonía con el estilo de su hermana mayor. Una elección versátil, cómoda y perfecta para los compromisos diurnos, que demostró que la infanta sabe adaptarse con soltura a diferentes contextos manteniendo siempre su esencia.

Mientras Leonor sigue asumiendo su papel institucional con creciente seguridad, Sofía va ganando espacio con paso firme, sin buscar protagonismo, pero conquistando por su autenticidad. La sobriedad de su look se alineó con el estilo escogido tanto por la reina Letizia —que lució un traje sastre en tonos neutros— como por la princesa Leonor, que se decantó por una americana con hilos metalizados.