Una empresa indemniza con 4.000 euros a un hombre que se rompió dos implantes dentales al morder una aceituna “sin hueso”

Un vecino de Bilbao consigue que la empresa Aceitunas Guadalquivir le compense por los daños causados por un hueso oculto en un tarro de aceitunas deshuesadas de la marca Carrefour

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José María G. C. compró
José María G. C. compró un bote de aceitunas deshuesadas y resultó que una llevaba sorpresa, un trozo de hueso que le rompió dos implantes dentales.

José María G. C., vecino de Bilbao, compró un tarro de aceitunas verdes sin hueso de la marca Carrefour, fabricadas por la empresa Aceitunas Guadalquivir. Una noche, mientras tomaba algunas como aperitivo, notó cómo se le rompían dos implantes dentales. La causa fue el hueso de una de las aceitunas que supuestamente debían ser deshuesadas.

El día siguiente, acudió al dentista donde le hicieron una primera actuación de urgencia en la que le extrajeron dos implantes. Esta primera intervención le costó 250 euros. Pero ahí no quedó la cosa. Tenía que esperar varios meses para que cicatrizasen las heridas antes de someterse al tratamiento para reconstruir su dentadura. Esta compleja reconstrucción tendría un coste de 4.951 euros, según el presupuesto que le dieron en su clínica dental.

El afectado, en vistas de lo ocurrido, se puso en contacto con el servicio de Atención al Cliente de Carrefour para presentar una reclamación. En su respuesta, la compañía francesa argumentó que «la probabilidad de que se presente un trozo de hueso en el producto final es mínima pero puede ser posible».

Además, advertía de que ya en el etiquetado se avisa al consumidor que «las aceitunas son deshuesadas mecánicamente, a pesar de todas las precauciones tomadas durante la preparación puede que excepcionalmente algún hueso, o fragmento de hueso, se encuentre en el producto».

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Reclamación

Ante la evasiva del supermercado a darle una solución, José María decidió acudir a FACUA Euskadi para que defendiese sus intereses como consumidor. La asociación recopiló toda la información necesaria y presentó una reclamación ante Aceitunas Guadalquivir, ya que era la empresa encargada de elaborar estas aceitunas sin hueso que comercializa Carrefour.

La empresa, en su respuesta, se mostró dispuesta a abonar los gastos generados por el incidente, por lo que pidió a la asociación que le enviase el certificado de titularidad de cuenta del afectado para hacerle un ingreso. Días después, el fabricante abonó al afectado 250 euros de la primera intervención de urgencia que tuvieron que hacerle. Eso sí, ignoró la cuantía de casi 5.000 euros correspondiente al tratamiento completo de reconstrucción.

La indemnización recibida “era del todo insuficiente”, señalan desde FACUA Euskadi, por lo que la asociación de consumidores preparó un nuevo escrito de reclamación donde pedía a Aceitunas Guadalquivir una indemnización que fuese acorde al perjuicio ocasionado. En esta ocasión se adjuntó además un informe de un perito odontológico que daba fe del daño que había sufrido José María por el hueso de la aceituna. Además, advertía a la empresa de que se reservaba cualquier tipo de vía administrativa o judicial para defender los derechos de su socio.

Acuerdo

La respuesta no se hizo esperar, y el fabricante remitió una nueva propuesta donde informaba de que, de acuerdo con su compañía aseguradora, ofrecía a José María una indemnización de 3.691 euros en compensación por todo lo ocurrido, cantidad que se sumaba a los 250 euros que ya había recibido anteriormente.

El afectado, finalmente, se mostró conforme con esta última propuesta y ya ha recibido en su cuenta los 3.941 euros de indemnización por los perjuicios sufridos por un hueso encontrado en una aceitunas que se venden como deshuesadas.