La reflexión de Andreu Buenafuente tras cumplir 60 años: “Hacerse viejo no es solo cansancio físico, hay mucha gente que se hace mayor y se vuelve facha”

El presentador de ‘Late Motiv’ ha confesado por qué ciudad ha sentido un “reenamoramiento”

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La reflexión de Andreu Buenafuente
La reflexión de Andreu Buenafuente tras cumplir 60 años (@andreubuenafuente)

Con más de tres décadas de trayectoria, Andreu Buenafuente ha sabido reinventarse como presentador, productor y guionista, desde sus inicios en la radio local hasta convertirse en figura clave del entretenimiento nacional. Creador de programas como Buenafuente, Late Motiv o Nadie sabe nada, ha basado su estilo humorístico en la ironía, la improvisación y el comentario social, dejando una huella profunda en la cultura televisiva contemporánea.

Sus comentarios, por tanto, tras un análisis o crítica social, son especialmente influyentes entre sus oyentes. De esta manera, el speech que ha hecho con su característica lucidez y autocrítica, en una entrevista reciente concedida al diario Ara, conducida por el periodista Albert Om, ha acercado una parte más personal del presentador a sus seguidores.

“Es una ciudad eléctrica, caótica, para ir de joven”

La reflexión de Andreu Buenafuente
La reflexión de Andreu Buenafuente tras cumplir 60 años (@diariara)

Desde que regresó a Barcelona en 2022 tras seis años en Madrid, el presentador catalán ha recuperado su conexión con una ciudad que considera parte fundamental de su identidad personal y profesional. “Sentía un reenamoramiento con la ciudad”, ha explicado. “Los primeros meses los vivía como una emoción. Volver a reconocer el paisaje, esa cafetería que me gusta... Fue muy bonito y me hizo ver que a veces, por cansancio o desgaste, despreciamos el lugar en el que vivimos”, ha reflexionado.

Su vínculo con la capital catalana se remonta a 1992, cuando llegó con 25 años, en plena resaca olímpica, y desde entonces ha sido un referente del humor televisivo y radiofónico. Frente a esta relación sólida con Barcelona, Buenafuente admite que Madrid, pese a sus oportunidades profesionales, nunca llegó a ser del todo su hogar. “Es una ciudad eléctrica, caótica, para ir de joven. Se sale mucho”, señala. “Nunca me he adaptado del todo”, reconoce sobre su etapa en la capital, que comenzó con 50 años, en un momento diferente de su vida, ya con familia y al frente de un exigente programa diario.

“Vienen de fuera, nos joden el trabajo, Barcelona ya no es lo que era”

@diariara “Jo, a Madrid, no m’hi he acabat d’adaptar mai” Andreu Buenafuente (Reus, 1965) viu un moment dolç personalment –amb la parella, Sílvia Abril, i una filla de 12 anys, la Joana– i també professionalment, amb el Nadie sabe nada a la ràdio al costat de Berto Romero, i amb Futuro imperfecto, el seu programa setmanal a Televisió Espanyola. Acaba de fer 60 anys i ja en porta trenta d’una trajectòria mediàtica que l’ha convertit en un dels personatges més populars, transversals i estimats de Catalunya, cosa que va percebre especialment quan el 2022 va tornar a viure a Barcelona, després de sis anys a Madrid. 📌 Tota l'entrevista, a l'enllaç del perfil #Entrevista #AndreuBuenafuente #AlbertOm #Catalunya #Barcelona #Català #DiariARA ♬ original sound - diariara

Actualmente, su vida gira en torno a proyectos como Nadie sabe nada, junto a Berto Romero, y el programa Futuro imperfecto en TVE. Aun así, rechaza cualquier etiqueta fija: “Soy de mi programa”. No obstante, el cambio más significativo parece ser personal. El presentador afirma que su centro de gravedad ha cambiado: “Lo importante para mí es estar con mi hija. No pensaba que lo diría nunca”, confiesa sobre Joana, de 12 años. Y aunque le gustaría que siguiera una vocación artística, lo tiene claro: “Evidentemente debe hacer lo que quiera”.

Del mismo modo, se ha permitido meditar sobre el inevitable envejecimiento y ha rememorado el consejo que le dio su compañero, Berto Romero. “Tienes que hacer como Clint Eastwood: no debes dejar entrar al viejo”, ha afirmado. Según puntualiza, ese “viejo” no es únicamente una cuestión física. “Hacerse viejo no es sólo cansancio físico, hay mucha gente que se hace mayor y se vuelve facha: ‘Vienen de fuera, nos joden el trabajo, Barcelona ya no es lo que era’. Esto también es un viejo que entra”, ha declarado.

Desde esta mirada, el humorista aborda el paso del tiempo no como una amenaza, sino como un desafío constante para no perder la conexión con el presente. En esa lucha contra la inercia del conservadurismo, Buenafuente mantiene firme su compromiso con el arte, la curiosidad y la ternura que le da su entorno más íntimo.